1. El ajo contiene un compuesto llamado alicina, el cual tiene potentes propiedades medicinales.
Crece en muchas partes del mundo y es un ingrediente popular en la cocina debido a su fuerte olor y delicioso sabor.
Sin embargo, a lo largo de la historia, el ajo se ha usado principalmente por sus propiedades medicinales y beneficiosas para la salud.
Su uso fue bien documentado por todas la grandes civilizaciones, entre las que se incluyen los egipcios, los babilonios, los griegos, los romanos y los chinos.
La “cabeza” entera recibe el nombre de bulbo de ajo, mientras que a cada segmento se le llama diente. Aproximadamente, hay 10-20 dientes en un solo bulbo de ajo.
La mayoría de los efectos que aporta a la salud se deben a uno de los compuestos de azufre que se forman cuando se pica, machaca o se mastica un diente de ajo. Este compuesto es conocido como alicina y es el responsable del distintivo olor del ajo.
La alicina entra en el cuerpo a través del aparato digestivo y viaja por todo el cuerpo, donde emplea sus potentes efectos biológicos.
Resumiendo: El ajo es una planta de la familia de las cebollas, cultivado por sus propiedades culinarias y efectos saludables. Es rico en un compuesto de azufre llamado alicina, del que se cree es el responsable de todos los beneficios que aporta a nuestra salud.
2. El ajo posee un alto valor nutritivo, pero contiene muy pocas calorías.
3. El ajo contiene antioxidantes que pueden ayudar a prevenir el Alzheimer y la demencia.
La oxidación causada por los radicales libres contribuye al proceso de envejecimiento. El ajo contiene antioxidantes que sostienen los mecanismos de protección del cuerpo contra la oxidación.
Los efectos combinados de reducción de colesterol y presión sanguínea, así como las propiedades antioxidantes, pueden ayudar a prevenir enfermedades cerebrales comunes como el Alzheimer y la demencia.
Resumiendo: el ajo contiene antioxidantes que protegen contra el daño celular y el envejecimiento. Puede disminuir el riesgo de sufrir Alzheimer y demencia.
4. El ajo mejora los niveles de colesterol, lo que puede disminuir el riesgo de enfermedades cardíacas.