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Alma Vilches
@AlmaCoLatino
Frente al alza de los precios de la canasta básica y la crisis en el sector campesino, las organizaciones que conforman la Mesa por la Soberanía Alimentaria proponen al gobierno la creación de una Reserva Nacional de Alimentos, como una herramienta para la intervención del Estado en la dinámica económica, garantizando mercados justos para una producción campesina de alimentos soberana y sustentable.
Judith Barrera, representante de Ecos El Salvador, señaló que en el país las compras de granos básicos a otros países, el alto costo de los insumos, la concentración del agua y la tierra y, sobre todo, la incapacidad del gobierno para regular el mercado de alimentos, están generando impactos críticos y sentidos en la población.
“La situación crítica de la producción campesina se agrava con la pandemia del COVID-19 y se profundiza aún más por los efectos de la guerra de occidente contra Rusia que se desarrolla en Ucrania, la crisis ecológica y climática”, enfatizó.
La producción campesina de alimentos enfrenta actualmente una dura crisis como resultado de la implementación del modelo neoliberal y políticas subsecuentes en el país, como el proceso de liberalización y desregulación de precios en la agricultura, implementado desde los años noventa que incluyó el cierre el Instituto Regulador de Abastecimientos (IRA).
Según Barrera, estas políticas han generado una situación donde el Estado abandonó su rol regulador trasladándose a los privados, siendo ahora unas pocas empresas especuladoras las que se enriquecen con la determinación del precio al que se compra a los productores y se vende a las familias.
Krissia Romero, miembro de ACUA, reiteró que una de las propuestas es la promoción de la agricultura mediante una estrategia de subsidios a la producción y comercialización de granos básicos a pequeña escala, una línea de créditos a bajo o nulo interés y una línea de micro seguros que la proteja de los vaivenes climáticos.
“El MAG deberá trabajar en la construcción de instalaciones adecuadas a nivel regional y local, así como en el desarrollo del proceso institucional que permita generar capacidad para el almacenamiento y la conservación óptima de la producción de al menos el 25% de los granos básicos del país, generando una línea de financiamiento y asistencia técnica para promover la gestión comunitaria de centros de acopio y almacenaje”, explicó.
Asimismo, consideró necesario un sistema de precios de garantía o precio mínimo para la compra de granos básicos a los productores a un precio previamente establecido por el Estado, de manera que se asegure un ingreso justo por su cosecha, incentivando, así, la producción nacional.
Otra de las propuestas es la creación del programa de agencia y abastecimiento de alimentos, desde los centros de almacenamiento hasta el consumidor final, garantizando precios regulados en los productos de la canasta básica alimentaria, principalmente maíz, frijol, arroz, y leche.
También, se incluye el establecimiento de una política comercial proteccionista mediante el diseño e implementación de una estrategia de renegociación de Tratados de Libre Comercio (TLC), suscritos por el país y anexos que componen el Sistema de Integración Económica Centroamericana (SIECA).
