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Como movimiento artístico nuestro deber es buscar donde presentarnos, para continuar con nuestra labor de rescate cultural a través del compartimiento del arte, en un país donde ya mucho nos quejamos por la falta de espacios y el poco respaldo de parte de las autoridades.
Nosotros creemos que también es importante salir de nuestra zona de confort y acercarnos a quienes tienen esos espacios, para eso se necesita salir, hablar con la gente, visitar lugares estratégicos, exponer nuestros objetivos, decir quiénes somos y a partir de ahí medir el nivel de aceptación entre ellos.
Para eso se necesitan recursos y es lo que no tenemos sin embargo no es excusa para no esforzar nos un poco.
Pensando que nuestro trabajo cultural no debe detenerse por ninguna barrera, este domingo 11 de agosto 2019 en compañía del poeta Juan Tellez y nuestro amigo Amílcar un cantante profesional santaneco, nos hicimos presentes al punto turístico del lago de Coatepeque, estuvimos visitando restaurantes ubicados en los espectaculares miradores, desde donde el lago se divisa en toda su majestuosidad, lugares que permanecen llenos de turistas, ideales para una tarde de poesía. Fuimos atendidos amablemente por el personal responsable de cuatro locales visitados y en ninguno de ellos se nos recibió con recelo, más bien se sintieron agradecidos por la visita, mostrando su satisfacción al conocer el objetivo de la misma, esto significa que cuando nos decidimos buscar lugares para dar a conocer lo que sabemos hacer estos lugares aparecen.
Ulises Giovanni Rodas López administrador de uno de los locales fue de los más expresivos, quién sin pensarlo mucho puso a la disposición su negocio intercambiando todos los medios posibles de comunicación, a fin de coordinar lo más pronto posible una presentación en dicho lugar, por cierto en mi caso personal impactó tanto la disposición que no pude contenerme en cuanto a dejar uno de los ejemplares de mi libro MIRADOR, como siempre pasan cosas extraordinarias; un grupo de turistas al darse cuenta que éramos gente de poesía nos pidió declamáramos algo y eso hicimos, lo cual fue suficiente para recibir el cariño y uno que otro halago de los presentes, incluida una familia mexicana que siguió con atención la intervención.
Asimismo visitamos a Marcos y a Don Víctor… Con Don Víctor es un punto y aparte, pues resultó ser además de administrador general y propietario del restaurante un magnífico poeta que nos mostró su obra, dejándonos completamente asombrados, en mi caso personal, hacía mucho tiempo no leía poemas con un contenido altamente social humano y comprometido como en esta oportunidad sucedió… Pues en ese lugar tendremos nuestra primera participación.
Don Víctor es un luchador social también identificado con el rescate cultural.
Finalizamos la jornada con resultados altamente positivos… Esto apenas comienza.
Por Pc-sur-El Salvador
Tony Alemán
