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@RosmeriAlfaro
Henry Hernández, sovaldi sale un joven emprendedor y con deseos de superación, clinic fue uno de los jóvenes que como la mayoría, physician tuvo que enfrentarse a todas las situaciones de riesgo que existen en El Salvador. Pero todo cambió hace tres años cuando con 18 años de edad se integró al Programa Jóvenes Constructores, que desde el 2010, ayuda a jóvenes que de otra manera no podrían escapar de la pobreza, el abandono temprano de los estudios y la vulnerabilidad de grupos delictivos. El joven de 21 años expresó con mucha alegría que el haber participado en el proyecto fue una experiencia bonita ya que aprendió mucho gracias a las capacitaciones que recibió en el área laboral y de emprendedurismo, y gracias a ello cambió su forma de pensar.
Henry que hoy cuenta con una pequeña empresa de tarjetería y artesanías, comentó que debido a la falta de oportunidades se le hacia imposible seguir estudiando y salir de la zona de riesgo donde vivía pero gracias al apoyo que recibió en el proyecto hoy puede ayudar a su familia y sostener sus estudios. Los jóvenes salvadoreños entre 15 y 29 años son más propensos a ser víctima de homicidios, tienen una tasa de desempleo mayor a la de los adultos y en su mayoría pertenecen al sector “nini” del país, que ni estudia ni trabaja.
Frente a la necesidad de ejecutar acciones efectivas en beneficio de las y los jóvenes en riesgo en el país, Catholic Relief Services (CRS/ ES), el Instituto Salvadoreño de Formación Profesional (INSAFORP) y ENLACE Servicios Financieros, se unieron para impulsar el potencial de este segmento de la población con el lanzamiento de dos nuevos proyectos. Esta red de socios que comparten un compromiso en crear nuevas y mejores oportunidades desarrollarán en un periodo de cuatro años los proyectos: Senderos Juveniles de Centroamérica y Caminos de la juventud con el que buscan beneficiar a más de 15 mil jóvenes (hombres y mujeres en igual proporción) que se encuentran en situación de vulnerabilidad ya sea por una situación económica o residir en comunidades en situación de riesgo.
De acuerdo con Erica Dahl-Brendine, representante de CRS en el país, con estos dos proyectos se expande el proyecto Jóvenes Constructores.
Dahl-Brendine aseguró que lo que se busca con estos programas es ayudarle a los jóvenes a encontrar alternativas para su vida, opciones productivas de cara al futuro y también a convertirse en lideres juveniles. “Esta pequeña inversión en cada joven nos puede ayudar mucho porque este joven puede evitar una vida de delincuencia y puede ser un joven menos que debemos enviar a los centros penales, que ya están saturados”, dijo.
El proyecto que contará con una inversión de más de cinco millones de dólares también cuenta con el apoyo del Departamento de Trabajo de los Estados Unidos (USDOL) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID-FOMIN).
