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Fredy Ramón Pacheco*
Los seres humanos nos corrompemos en un proceso de descomposición incoado por los sistemas políticos y sociales en su dependencia del manejo de los factores económicos y la distribución de la riqueza, la distribución de los recursos naturales y del producto de los desarrollos industriales, agrarios u otros que se implementen en un país.
Sencillo: De la Equidad o Injusticia o parcialidad, se determinarán los comportamientos de los seres vivos dentro de un grupo social. Estos factores marcan el rumbo de todas las especies. Su lucha por la supervivencia se basa en el esfuerzo por la consecución de las primeras necesidades de su vida: Alimentación. Y en 600 años en todos los regímenes predominó la fuerza y la explotación del hombre por el hombre para apoderarse y acumular el alimento en pocas manos, mientras el resto de las poblaciones en todo el orbe morían en la mayor indigencia. En el Principio la prehistoria, eran amos de los recursos quienes tenían en su poder armas más poderosas para saquear, robar, privar a los otros del alimento; eran entonces rocas palos arcos y flechas. Hoy es el grupo de los 4 los más poderosos del planeta, amos y señores de todas las riquezas y para defender su poder tienen armas atómicas y acumulados los grandes capitales con que se mantiene el poder.
Desde que se organizan las sociedades son los más “hábiles” en el canje de intereses electorales, ofreciendo a los más débiles, ingenuos, repartir equitativamente los bienes producidos por el trabajo de “todos”. Estos se llamaron hasta hoy gobernantes, y todos sin excepción fueron regímenes explotadores, avaros y corruptos representantes de las tendencias reaccionarias de los amos. Sometieron a esos débiles, ingenuos, borregos, ignorantes de los verdaderos objetivos de aquella clase gobernante, a la fuerza, la esclavitud, al látigo y la opresión. Y en la sombra durante esos centenares de años fueron unos corruptos: ladrones de los sueños de los pueblos. No se conoció jamás justicia que condenara sus felonías, sino la justicia impuesta por ese poder contra los gobernados.
Y no es sino justamente hasta el año 2009… apenas hacen escasos 7 años, que el pueblo salvadoreño se quita de encima toda esa lacra explotadora y ruin de más de 600 años, eligiendo un presidente con una tendencia ideológica radical diferente a quienes usufructuaron el poder económico y político en toda la historia del país….
¿Errores? ¿Defectos? ¿Vicios?…Incongruencias, debilidades, porque llegan al poder político, pero no tienen el más importante poder que es el económico. Pues este, EL CAPITAL, sigue en manos de quienes lo acumularon en sus alforjas durante todos esos años pasados. Y capital no solo significan unos centavos, sino las fuentes del imperio mundial de las instituciones que lo sustentan.
Aquellos fogueados en el robo y la explotación por los expertos invasores que nos colonizaron, construyeron una fortaleza económica en el transcurso de sus gobernaciones, que hoy les sirve como objeto de chantaje, soborno, humillación para doblegar al nuevo sistema de gobierno a su voluntad… Ante un pueblo que quizás en toda su historia, humillado y esclavizado por los amos del poder, nunca entendió que para obtener sus derechos no podría lograrlo jamás a través de un jueguito electorero, sino que tenía que arrebatarle el poder total a quienes lo detentaban con una acción realmente transformadora: una verdadera revolución como la francesa, cubana, china, por poner algunos ejemplos. Nuestro proceso en El Salvador, en cambio, tiene el mismo perfil de Brasil, Venezuela, Argentina, Bolivia, Nicaragua, donde los poderes económicos se dejaron intactos en manos de la clase dominante y como tal sigue marcando los destinos de estos países.
