Tomado de UNIVISIÓN
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), anunció el martes que las relaciones del gobierno mexicano con las embajadas de Estados Unidos y Canadá quedaban “en pausa” tras las críticas que funcionarios de ambos países hicieron a la reforma judicial propuesta por el mandatario.
El jueves pasado, el embajador estadounidense en México, Ken Salazar, dijo que la propuesta oficialista, que, entre otras cosas, implica que los jueces sean elegidos por voto popular, supondría un “riesgo” para la democracia mexicana y podría poner en peligro la relación comercial con Estados Unidos. Por su parte, Canadá manifestó una preocupación similar. La iniciativa de reforma constitucional lleva meses generado tensión en México porque sus críticos consideran que podría comprometer la independencia judicial al dejar la designación de jueces a una cuestión de popularidad. Este mes incrementaron las voces en su contra, tanto de académicos como de entidades de análisis económico y de los jueces y trabajadores de las cortes federales, que iniciaron la semana pasada un paro de labores y protagonizaron diversas protestas.
¿Qué significa que las relaciones diplomáticas están «en pausa»?
El término de relaciones “en pausa” no es un concepto diplomático formal y sus consecuencias no están claras, aunque el mandatario lo ha utilizado en otras ocasiones con otros países.
Alicia Bárcena, secretaria de Relaciones Exteriores de México, dijo a través de sus redes sociales que la relación con los “amigos y vecinos de Norteamérica es prioritaria y fundamental y, a nivel cotidiano, sigue fluida y normal”.
López Obrador aseguró que el gobierno no pedirá a Salazar que abandone el país porque consideró que esos comentarios tenían como origen el Departamento de Estado, pero pidió una rectificación.
“¿Cómo le vamos a permitir que él opine que está mal lo que estamos haciendo?”, cuestionó López Obrador, quien aclaró que no se trata de una “pausa” en la relación con el gobierno de Joe Biden. “Ojalá ya haya, por parte de ellos, una ratificación de que van a ser respetuosos de la independencia de México, de la soberanía de nuestro país. Mientras no haya esto, y sigan con esta política, hay pausa”, agregó, insistiendo en que esta era con las embajadas y no con sus gobiernos.
“Pausar significa que vamos a darnos nuestro tiempo”, matizó AMLO.
No es la primera vez que López Obrador pone “en pausa” las relaciones exteriores. En 2022, el presidente mexicano utilizó la misma expresión y puso “en pausa” las relaciones con España cuando acusó a las empresas energéticas españolas de tratar a México como “tierra de conquista” porque aprovecharon condiciones ventajosas de inversión durante los gobiernos anteriores que su administración limitó.
En esa ocasión, las relaciones bilaterales continuaron aunque con un tono más crispado porque, además, ya había habido tensión en 2019, cuando López Obrador solicitó al rey de España que pidiera perdón por la conquista, cosa que el monarca no hizo.