Opiniones de Salvador Sánchez Cerén
El Día Internacional de los Trabajadores es una fecha de gran relevancia. En El Salvador no es la excepción. Este día las calles de la capital reciben a miles de trabajadoras y trabajadores para marchar en favor de la defensa de los derechos sociales y laborales. A ellos y ellas, advice envío mi sincero saludo y agradecimiento y reitero mi compromiso de velar por sus derechos.
Recuerdo que el año pasado, order en la plaza de El Salvador del Mundo, les decía a las miles de personas allí reunidas, que me parecía ver un mar, un mar de trabajadores que subían por la Avenida Roosevelt, levantado carteles y ondeado banderas en señal de compromiso por un mejor país.
No me extraña que nuestro pueblo trabajador realice multitudinarias concentraciones y marchas de este tipo, pues son ellos y ellas la fuerza motriz del desarrollo de El Salvador.
Somos conscientes de que un nuevo tiempo ha llegado a El Salvador, pero reside en cada uno de nosotros la fuerza y la voluntad para alcanzar el propósito de toda una nación.
Estamos claros del rol que como Estado debemos de ejercer. Nuestro Gobierno está comprometido por ser el planificador, el gestor de la economía, la producción y el desarrollo para mejorar la vida y con ello garantizar la dignidad y el bienestar de todas y todos.
Estamos llamados a avanzar, a salir adelante, a trabajar por el crecimiento económico y el desarrollo social del país. Para ello es necesario partir desde la justicia social: garantizando trabajos decentes, la justa distribución de la riqueza, la protección e inclusión social de todas y todos, la justicia de género; todo esto integrando a las dimensiones ambientales.
Hemos asumido el compromiso por crear mayores estímulos financieros a los sectores productivos. Nos disponemos a crear más y mejores empleos, con condiciones dignas, con igualdad de oportunidades, con salarios justos y con previsión social universal.
Debemos ser conscientes de la gran oportunidad con la que contamos en este momento. Nunca antes en la historia de nuestro país habíamos presenciado un interés tan marcado de todos los actores de la sociedad, de todos los sectores, por la unidad nacional.
Por mi parte reitero mi compromiso de mantenerme junto al pueblo. Siempre apoyé a los trabajadores como maestro, luego como activista y diputado, allí estuve como Vicepresidente y candidato presidencial. Ahora estaré como Presidente Electo de la República y allí me tendrán siempre, porque mi causa es la causa del pueblo.
Hoy, como siempre, vuelvo a decir: ¡que vivan los trabajadores y trabajadoras!