@arpassv
El lamentable fallecimiento del ex presidente Francisco Flores, pharm este fin de semana, provoca dos reflexiones pertinentes: una relacionada con su legado al país y otra con el juicio que extingue la parte penal pero sigue la responsabilidad civil porque los destinatarios de los donativos de Taiwán están “vivitos y coleando”.
En relación al legado del ex presidente Flores, vale decir que su gobierno fue de corte autoritario, corporativo y corrupto. Con una correlación legislativa favorable (ARENA-PCN-PDC), el respaldo de las élites oligárquicas y el apoyo estadounidense, nunca quiso dialogar con la oposición y profundizó la lógica neoliberal impuesta desde la administración de Alfredo Cristiani.
Francisco Flores dolarizó la economía, con engaños (dijo que era bimonetarismo), y –cínicamente- declaró después que el proyecto dolarizador fue “el secreto mejor guardado”, sin que protestaran por eso FUSADES y otras instancias conservadoras que hoy pregonan la transparencia. Así dejó al país sin política monetaria, aumentó los precios para los consumidores, favoreció a los banqueros y facilitó el lavado de dinero.
También firmó el nocivo Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos. Sus principios de expropiación indirecta, trato nacional a empresas extranjeras y solución de controversias en tribunales corporativos extranjeros, vulneran flagrantemente la independencia, soberanía y autodeterminación del país.
Flores mandó soldados para apoyar la invasión a Irak, le dio entrada a las empresas mineras, respaldó el golpe de Estado en Venezuela en abril de 2002, dijo que el mayor honor en su vida fue que George Bush II lo llamara “su amigo” y avaló el escandaloso fraude CEL-Enel que impidió al Estado percibir más de 1,800 millones de dólares.
Y respecto al juicio en su contra, éste no termina con su muerte, porque sigue la responsabilidad civil y quedan los “destinatarios” de los millonarios fondos donados por Taiwán que Flores desvió a cuentas del partido ARENA a través del Banco Cuscatlán y del Centro de Estudios Políticos “Antonio Rodríguez Porth”.
El propio hijo del expresidente señala en un video, publicado en redes sociales y retomado por todos los medios nacionales, señala que “los destinatarios (de los donativos de Taiwán) están en ARENA”.
Por tanto, el Fiscal General debe proceder de inmediato contra los “destinatarios” areneros y los participantes en la trama del lavado, el Tribunal Supremo Electoral debe iniciar el proceso de cancelación de ARENA por financiar sus campañas con dineros ilícitos y el país debe recuperar el dinero robado.