Liliana Martínez-Scarpellini
Los Angeles/dpa
Ya es de conocimiento popular que ninguna franquicia de Universal Studios ha tenido el calado de “Rapido y Furios”, la saga para aficionados a los coches de carreras y las competiciones callejeras ilegales que ahora llega a su octava entrega sin señales aparentes de agotamiento.
De hecho, Vin Diesel, el protagonista indiscutible de todas las películas, confirmó hace más de un año que habrá una novena y una décima entrega, además de los “spin-offs” con personajes históricos que también están sobre la mesa.
Por eso esta octava, pese a lo que muchos anticiparon tras la muerte del actor Paul Walker en 2013, no será ni mucho menos el final de una historia que comenzó a gestarse en 2001 y que desde entonces ha recaudado 3.896 millones de dólares en todo el mundo. Hay coches de carreras para rato.
En esta entrega, Diesel sigue llevando la voz cantante junto a viejos conocidos de la saga como Michelle Rodríguez, Jason Statham, Tyrese Gibson y Chris Bridges, con el atractivo añadido de ver a Charlize Theron haciendo su debut en la franquicia.
La actriz de “Mad Max: Fury Road” da vida a Cipher, una brillante mente criminal que consigue corromper a Dominic (Diesel) y devolverle a su antigua vida. Y es que la cinta comienza con ese aire de normalidad para todo el equipo, que parece haberse retirado o haber quedado exonerado de sus anteriores actividades.
Hasta que aparece el personaje que interpreta Theron y cambia el panorama, abriendo un escenario de acción y adrenalina como reclaman los aficionados. Todo ello aderezado con escenarios internacionales, desde Cuba a Islandia, pero sin olvidar Cleveland y Nueva York, siempre con Walker en la memoria.
De hecho, Diesel aseguró hace meses sus motivos para seguir adelante mucho tienen que ver con su relación con el malogrado actor. “Paul Walker solía decir que que una octava película estaba garantizada. Y de alguna forma, cuando tu hermano garantiza algo, algunas veces sientes que te tienes que asegurar de que ocurre”, explicó.
“Furious 7 era para Paul, y la octava película es a raíz de Paul”, añadió. Además de Walker, tampoco estará James Wan, el director de la séptima entrega, pues esta vez Universal se decantó por F. Gary Gray, responsable de “The Italian Job” y “Straight Outta Compton”.
La expectativa siempre está ahí: baste el dato del número de veces que se ha visto el trailer oficial en Youtube, 15 millones en total, como referencia de lo que está por venir cuando se estrene la cinta en términos de taquilla. Aún así, los expertos no creen que la octava entrega funcione tan bien como la séptima.
Para su primer fin de semana se espera que la recaudación oscile entre los 110 y los 120 millones de dólares, bastante por debajo de los 147 millones de dólares que logró ingresar “Fast & Furious 7” en 2015.
También es cierto que lo logró tras la muerte de Walker y que su recuerdo hizo que se acercaran muchos seguidores hasta las salas de cine, con escenas incluidas de lo último que rodó antes de su trágico accidente en noviembre de 2013.
A favor tiene que se estrenará en el mes de abril, cuando la competencia suele ser menor en cartelera. En este caso se enfrenta a la secuela de los Pitufos como única gran amenaza, “Smurf: The Lost Village”, por lo que es más que probable que brille con luz propia.