Caracas/Prensa Latina
El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, reafirmó hoy el compromiso de su país con la unidad, la defensa de la soberanía y la paz, durante su intervención en la XXIII Cumbre del ALBA-TCP en la capital venezolana.
Díaz-Canel advirtió en la magna cita que el imperialismo persiste en su proyecto de dominación «sobre nuestras tierras, financia y promueve la violencia, la desestabilización y los discursos de odio».
El mandatario llamó al respeto y cumplimiento de los postulados de la proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz.
«Que la región siga siendo reconocida internacionalmente por su compromiso con la paz y la estabilidad regional es un asunto de máxima importancia para el presente y el futuro de los pueblos», subrayó.
En otro momento de su alocución, el jefe de Estado felicitó al pueblo venezolano por el desarrollo del nuevo proceso electoral en un clima de paz y en apego a su constitución, a la vez que manifestó su rechazo a las injerencias e imposiciones externas que pretenden influir en el funcionamiento de las instituciones de la República bolivariana.
Díaz-Canel además reiteró la más enérgica condena a la violenta irrupción de la policía ecuatoriana en la sede diplomática de México en Quito.
Reconoció a los «hermanos nicaragüenses que resisten el asedio mediático, y los intentos injerencistas del imperialismo para quebrantar su orden constitucional», así como expresó su apoyo y respaldo a Bolivia en la defensa de su soberanía.
Indicó que la comunidad internacional tiene una gran deuda con el pueblo haitiano, que fue sometido a repudiables castigos por potencias imperiales.
Haití necesita asistencia y cooperación para el desarrollo, señaló el mandatario, quien recordó que su país ha ofrecido al pueblo de esa nación caribeña cooperación fraternal y desinteresada y aun en las circunstancias actuales mantiene una brigada médica allí que brinda servicios.
El dignatario también expresó su apoyo a la independencia del pueblo puertorriqueño y manifestó su solidaridad con los argentinos, al tiempo que aseguró que el Caribe siempre encontrará en el ALBA un aliado en la defensa de sus intereses.
Apreció el apoyo del mecanismo de integración en la lucha por el fin del bloqueo del gobierno de Estados Unidos contra el pueblo cubano y la exclusión de la isla de la unilateral lista de países patrocinadores del terrorismo.
Manifestó que Cuba continuará su lucha hasta que Washington levante el cerco económico, comercial y financiero, política a la que calificó de cruel, inmoral e injustificable.
El presidente cubano aseveró que su país merece vivir en paz, y en igualdad de condiciones demostrar todo lo que sería capaz de avanzar y construir en socialismo.
Nuestro compromiso con la integración y la unidad es invariable, subrayó el jefe de Estado, quien expresó la voluntad de su país de trabajar sin cansancio por un ALBA-TCP de victorias, paz, unidad, solidaridad y cooperación.