Diario Co Latino 134 años comprometido con usted
Artículos relacionados
Madrid/dpa
Conforme a lo que se espera de ellos, Real Madrid y Barcelona ocupan ya los dos primeros puestos de la Liga española de fútbol, pero el juego que ofrecen ambos colosos está todavía muy lejos de la excelencia.
La prueba fue la última jornada del torneo. Mientras el Barcelona apenas ganó 1-0 en casa al colista Granada, el Real Madrid venció por 4-1 en el campo del recién ascendido Alavés, un resultado que no reflejó todo lo que sufrieron los blancos ante su modesto rival.
“No se gana una Liga sin sufrir, el fútbol es así”, resumió el técnico francés Zinedine Zidane en un discurso aparentemente contradictorio con el resultado, pero no así por el juego de los suyos.
Porque la realidad es que el Real Madrid volvió a evidenciar problemas para gobernar un partido y estuvo viviendo al filo durante más de una hora. Resolvieron Cristiano Ronaldo, con un hat-trick, Keylor Navas, con dos paradas trascendentes, y Álvaro Morata, con otra actuación decisiva saliendo desde el banquillo.
Precisamente, la situación del canterano volvió a ser un asunto de debate viendo su gran rendimiento en contraste con lo poco que ofrece últimamente el francés Karim Benzema, de momento un titular indiscutible para Zidane. Morata es junto a Cristiano Ronaldo el máximo goleador de su equipo, ambos con siete tantos, y sigue llamando a las puertas de la titularidad.
El Real Madrid, con 28 goles, es el segundo máximo realizador de la Liga española, con dos menos que el Barcelona, un equipo que vio rebajada su media con el mínimo triunfo ante el Granada.
Con la llamada “MSN”, Lionel Messi, Luis Suárez y Neymar, muy por debajo de su rendimiento habitual, el equipo de Luis Enrique acabó defendiéndose ante un rival tan inofensivo como el Granada, colista de la Liga española con tres puntos, ocho goles a favor y 24 en contra. “El Barça se vuelve aburrido”, aseguró el diario “As”, mientras el propio Luis Enrique reconoció la atonía de su equipo: “Me quedaría con los tres puntos, pero no fue el mejor día”.
Las dificultades que están mostrando Real Madrid y Barcelona para ofrecer un juego acorde a lo que se espera de dos planteles tan millonarios sigue alimentando un debate: ¿Se puede jugar bien con un 4-3-3?
Posiblemente sí, pero no es lo que está ocurriendo ahora con dos equipos que juegan con idéntico esquema y con enorme protagonismo de sus respectivos tridentes ofensivos, no siempre dispuestos a colaborar en la recuperación del balón.
Otra circunstancia es que cuando no hay protagonismo de las estrellas atacantes, los equipos se atascan y sufren para ganar e imponer su juego.
Esta jornada le ocurrió
al Barcelona, antes
al Real Madrid.
Por detrás de ambos, en la tercera posición, permanece al acecho el Atlético de Madrid, para muchos el equipo español que mejor está jugando desde que comenzó la temporada.
Ganó 4-2 al Málaga en la última jornada a pesar de jugar buena parte del partido en inferioridad por la expulsión del defensa montenegrino Stefan Savic.
Una curiosidad, o quizá no tanto: el Atlético de Madrid es el equipo con mejor diferencia de goles en todo el torneo español, gracias a sus 25 goles a favor y seis en contra.
