Granada/España/dpa
El Real Madrid ganó hoy 2-1 en el campo del Granada gracias a un gol agónico del croata Luka Modric a cinco minutos del final.
El encuentro, healing correspondiente a la vigesimotercera jornada de la Liga española, fue una pesadilla para el Real Madrid, que en muchos minutos estuvo a merced del penúltimo clasificado. Karim Benzema adelantó a los blancos y Youssef El Arabi igualó antes de que Modric resolviera con un gol espectacular.
Fue el primer triunfo del Real Madrid como visitante con Zinedine Zidane en el banquillo y sirvió para que su equipo se mantuviera a un punto del Atlético y a cuatro del Barcelona, éste con un partido menos.
En la primera parte, el Real Madrid sólo fue superior en el marcador. El Granada puso un marcaje al hombre sobre Modric y Kroos, y el equipo blanco no encontró la forma de sacar el balón con claridad. Sólo encontró soluciones con las subidas de sus laterales, Marcelo y Carvajal, ambos muy activos.
El conjunto blanco sumó tantas llegadas como el Granada, quien puso a prueba la seguridad de Keylor Navas, y Cristiano Ronaldo envió un balón fuera en una clara ocasión antes de que el Real Madrid se adelantara.
La jugada ocurrió a la media hora, con una nueva subida de Carvajal. El lateral diestro tuvo paciencia para buscar la mejor opción y Benzema apareció para aprovechar la asistencia. Fue el decimonoveno gol del francés en la presente edición de la Liga española, a uno de Luis Suárez, el máximo anotador.
El Real Madrid conservó la ventaja hasta la llegada del descanso, que llegó entre nuevas llegadas de un Granada ambicioso y agresivo.
La segunda parte no tuvo ningún control y en los primeros minutos el Real Madrid pareció más cerca de sentenciar. Por ejemplo, Benzema desperdició un mano a mano con Andrés Fernández, quien sacó una mano prodigiosa.
Fue una jugada importante, pues el Granada igualó a la hora de partido. Modric chocó con el árbitro y perdió el balón, que acabó en los pies de El Arabi para que el marroquí definiera ante la salida de Navas.
El Real Madrid se descosió y el Granada nunca renunció a los contraataques. El equipo blanco no mostró ningún plan de ataque claro y perdió infinidad de balones. Quedó a merced de la épica para llevarse un triunfo con el que contaba antes de comenzar el duelo.
Esa épica llevó el nombre de Modric, quien a cinco minutos del final desató un espectacular disparo desde fuera del área para poner el balón en el ángulo. Fue su primer tanto en la Liga española y valió tres puntos de oro para los blancos.