@adrianagonz_lez
Personas discapacitadas acompañadas de miembros del Centro Salvadoreño de Tecnología Apropiada (CESTA) y el Comité Unido para el desarrollo Integral (CUDIPD) se manifestaron en las afueras del Ministerio de Trabajo para exigir mayores de trabajo e inclusión laboral.
Aprovecharon el marco del sexto aniversario de que la Convención de Derechos de las Personas con Discapacidad entró en vigencia para hacerse escuchar.
El director del departamento de rehabilitación CESTA, doctor Carlos Wilfredo Montes, buy viagra dijo que se necesita que haya un personal específico dentro del Ministerio de Trabajo para impulsar los planes programas y proyectos para fortalecer la inserción.
“Estamos pidiendo en que los fondos provenientes de multas por no contratar se formule la norma legal para que no vayan a dar al fondo general de la nación, sovaldi para que sean derogadas de la partida para fortalecer la inserción laboral de las personas con discapacidad”, expresó Montes.
Además, apuntó la importancia de que se ponga más atención a las necesidades de los recursos para el desarrollo de planes de inserción.
“En el consejo nacional de atención integral se ha desarrollado un plan estratégico pero no hay fondos para dinamizarlos y capacitar gente con discapacidad auditiva y física”, enfatizó.
Según el director, en la gestión del presidente Mauricio Funes se han tenido avances en el tema.
Explicó que, de acuerdo con sus cifras, en 2008 solo había 135 discapacitados empleados; no obstante, en 2012, el número había crecido a 1,300. “Hay inserción, aunque es poca. 235,000 personas están discapacitadas en el país y de esas 18 mil están en la capacidad e trabajar.
Definitivamente, no se cumple el mandato de ley de contratar una persona con discapacidad por cada veinticinco trabajadores” dijo finalmente.
Por otra parte, esperan que se amplíe la Red de Gestores a nivel local para que las empresas realicen estudios sobre las demandas de las personas con las diferentes discapacidades. Los gestores actualmente no están en todos los municipios.
El CUPID y el CESTA piden específicamente que se implementen sistemas de computación con braille y sistemas de comunicación para las personas con discapacidad auditiva; ya que si no existen dichos medios, aunque estén las oportunidades laborales, los discapacitados no podrían realizar su trabajo.