Gloria Silvia Orellana
@GloriaCoLatino
La Red Centroamericana en Solidaridad con las Trabajadoras de la Maquila (REDCAM) apeló al Plan de Contingencia Regional Centroamérica Unida contra el Coronavirus, que recientemente formó el Sistema de Integración Centroamericana (SICA), para que garanticen la estabilildad económica y laboral de amplios sectores vulnerables de estos pueblos.
“Recomendamos a los gobiernos y empresarios de la región tomar medidas específicas y eficaces para proteger a las personas trabajadoras en condiciones de mayor vulnerabilidad y, en especial, a las personas quienes, producto de las medidas tomadas para la contención de la pandemia, pierdan sus empleos y sustento para sus familias”, afirmaron. REDCAM señaló que, en el marco de la emergencia sanitaria global por causa del COVID-19 y rápida diseminación, han quedado al descubierto las debilidades de los sistemas de salud pública de la región y seguridad social, que exponen a mayor peligro a las personas que venden su fuerza de trabajo en diversos sectores productivos.
“La coyuntura planteada por la emergencia global debido a la pandemia del COVID-19, demuestra la necesidad de reinventar la solidaridad entre las personas, familias, comunidades y países y, por qué no, la responsabilidad social de las empresas. Es una oportunidad para mejorar las condiciones laborales de los sectores más precarios, lo cual requiere del esfuerzo conjunto de gobiernos, empresas y población trabajadora para repensar los mercados de trabajo para que el empleo, verdaderamente, promueva el bienestar y desarrollo de las personas trabajadoras”, dijeron.
Sobre la seguridad social y la salud, REDCAM sugirió un enfoque de administración desde la óptica de bienestar social colectivo y no regulados por el mercado, al hacer énfasis en que las medidas de contención tomadas en el marco del COVID-19 podrían agravar la situación de desigualdad social de las trabajadoras de maquila y otros sectores económicos que se encuentran en vulnerabilidad.
Asimismo, reseñaron que los empresarios de maquilas obtienen beneficios fiscales y operan bajo regímenes de Zona Franca en Centroamérica; por tanto, no pueden evadir las responsabilidades patronales que les demandan garantizar los derechos laborales de las personas trabajadoras y, ante todo, cumplir con medidas de salud, licencias remuneradas y pago de salarios completos durante la emergencia.
“A las marcas, empresas nacionales y transnacionales, reorientar los programas de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) para satisfacer las necesidades inmediatas y básicas de los trabajadoras de zonas francas y de otros sectores afectados. A las instancias regionales como el SICA y PARLACEN, actuar con determinación para promover acuerdos regionales que garanticen la sostenibilidad de los empleos y ampliar la seguridad social e impedir despidos”, puntualizaron.