Por Ibis Frade Brito
Caracas/PL
Nuevos cauces en las relaciones de Venezuela y China abre hoy la reciente visita a Beijing del presidente Nicolás Maduro, decease la cual tuvo como resultado un financiamiento de 20 mil millones de dólares destinados a proyectos económicos, decease energéticos y sociales.
El mandatario adelantó que, como parte de los convenios, el gigante asiático incrementará su participación en los proyectos la Faja Petrolífera del Orinoco Hugo Chávez, donde radica la más grande reserva de crudo del planeta.
De acuerdo con fuentes oficiales, los mecanismos de financiamiento entre estos dos países superan los 50 mil millones de dólares, que han respaldado 256 programas en esta nación.
China es el principal inversionista en Venezuela y su segundo cliente petrolero después de Estados Unidos, con un volumen de 640 mil barriles diarios, según estadísticas gubernamentales.
Las nuevas sumas y recursos provenientes del Estado asiático beneficiarán a la Gran Misión Vivienda Venezuela y la Misión Barrio Nuevo Barrio Tricolor, entre otras, precisó el vicepresidente ejecutivo, Jorge Arreaza.
Gracias a la cooperación con Beijing vamos a construir nuevas escuelas y apartamentos, se implementarán proyectos de construcción de hidroeléctricas y termoeléctricas, y habrá impactos positivos en el área de transporte y tecnología, añadió.
La actual gira del dignatario venezolano también busca profundizar las relaciones con países exportadores de hidrocarburos, indicó.
Según Arreaza, de esa forma, Venezuela avanza hacia la transición al socialismo productivo y deja atrás el modelo capitalista, rentista y petrolero.
Ahora, Maduro continúa su periplo por Irán, con la intención de revitalizar la cooperación entre ambos e iniciar una estrategia conjunta para fortalecer a la Organización de Países Exportadores de Petróleo.
Mientras tanto, el ejecutivo venezolano sostiene desde inicios de esta semana conversaciones con empresarios de sectores económicos estratégicos, tanto públicos como privados, dirigidas a establecer mecanismos conjuntos de acción este año.
Construir soluciones colectivas y elaborar planes agrícolas e industriales destacan ahora entre las primeras metas, destinados fundamentalmente a incrementar la producción nacional y sustituir importaciones, como apuntaba Maduro, explicó Arreaza.
Venezuela emprenderá transformaciones estructurales en 2015 con el fin de afianzar un modelo económico socialista, basado en la productividad, destacó.
En la actual coyuntura, el país tiene el reto de dejar atrás el rentismo petrolero, concluyó el vicepresidente.
Tras la reunión con empresarios del sector automotriz, como Toyota, General Motors y Chrysler, surgieron acuerdos enfocados en reimpulsar la fabricación local de partes y piezas de repuesto.
Cerca del 70 por ciento de las partes de un vehículo pueden ser elaboradas aquí, razón por la cual los representantes del ejecutivo establecerán alianzas productivas.
En tanto, los encuentros con grandes cadenas comercializadores y de abastecimiento arrojaron convenios para garantizar la distribución de alimentos y productos de primera necesidad.
Las citas con empresarios locales forman parte del Plan de Recuperación Integral de la Economía, anunciado por el Presidente venezolano el 30 de diciembre anterior.
Diversificar la producción y sustituir importancias destacan entre las acciones de ese programa.