Lima / Prensa Latina
El Parlamento peruano debatirá este jueves, en medio de gran expectativa y tenso contexto político, la renuncia de la vicepresidenta Mercedes Aráoz, presentada hace meses, tras su intento de reemplazar al jefe de Estado, Martín Vizcarra.
El tema genera interés porque Aráoz, economista neoliberal y muy cercana al exgobernante Pedro Pablo Kuczynski -en prisión preventiva domiciliaria por posinle corrupción-, declaró que está dispuesta a encargarse de la presidencia si Vizcarra tuviera que alejarse del cargo por un viaje y su renuncia aún no fuera aceptada.
Muchos consideraron que esa declaración tenía implícita la insinuación política de que se ofrecía para reemplazar al mandatario y en las redes sociales de Internet recibió duras críticas que la acusaban de usurpadora reincidente, entre otros epítetos.
El analista político Gustavo Espinoza ubicó la serie de entrevistas concedidas por Aráoz en el contexto de lo que considera una estrategia golpista impulsada por lo que llama mafia política neoliberal y los sectores más reaccionarios.
Mencionó al respecto declaraciones del exjefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, almirante en retiro Jorge Montoya, que presionan al gobierno a endurecer y, aunque lo niega, militarizar las acciones contra la propagación del Covid-19.
Espinoza añade que el clima para un posible golpe lo generan también los ataques de figuras mediáticas de similar corte que se repiten en las redes sociales, a cargo de elementos que usan argumentos de los partidos neoliberales Fuerza Popular y Apra, enconados enemigos del gobierno.
‘La declaración (de Aráoz) no se trata de una expresión aislada. Busca simplemente vacar a Vizcarra’, afirmó.
La vicepresidencia es un cargo que en Perú carece de contenido y constitucionalmente solo se ejerce cuando el jefe de Estado viaja o renuncia, aunque tiene una oficina en el palacio de gobierno que Aráoz no ocupa.
La economista presentó su renuncia el primero de octubre de 2019, tras el fracaso del intento del parlamento bajo control de la oposición neoliberal, de destituir a Vizcarra y ungirla a ella presidenta, ante la disolución constitucional decretada el día 30 por Vizcarra.
Aráoz, contraria a la disolución y más cercana a ese sector de la oposición, juró el cargo ante el pleno parlamentario, pero al día siguiente tuvo que renunciar al encargo y a la vicepresidencia, ante el apoyo masivo a la decisión del mandatario que hizo fracasar el golpe parlamentario.
La dimisión requiere la aprobación del pleno legislativo, que entonces estaba disuelto y fuentes parlamentarias consideran que, pese a que en el nuevo Congreso hay elementos afines al grupo que manejaba al anterior Congreso, la renuncia de Aráoz será aprobada.
De ser así, el segundo en la línea de sucesión presidencial será el titular del Congreso, Manuel Merino, del centrista partido Acción Popular (AP) y a quien, según las fuentes consultadas, no desagradaría encargarse de la Presidencia en casos de ausencia del mandatario.
Uno de los que da por hecho que se hará efectiva la dimisión, es el legislador Daniel Urresti, quien en un mensaje de Twitter escribió: ‘áAdiós Mechita (diminutivo de Mercedes)! y pronto áBienvenida a la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales!’.
Se refirió así a un muy posible proceso a Aráoz por usurpación de funciones que cometió al jurar como presidenta, delito del que fue acusada judicialmente en esos días por el legislador progresista Marco Arana.