Por Damian Wroclavsky
Brasilia/AFP
El influyente ministro brasileño Geddel Vieira Lima, a cargo de la articulación política del gobierno, dimitió este viernes tras denuncias de tráfico de influencias que apuntan al propio presidente conservador Michel Temer.
Tras «una profunda reflexión (…) presento mi pedido de exoneración del cargo» de secretario del Gobierno, indicó Vieira Lima en una carta al mandatario divulgada a la prensa.
La crisis estalló cuando el ministro de Cultura Marcelo Calero renunció la semana pasada, acusando a Vieira Lima de haberlo presionado para que el Instituto del Patrimonio Histórico (Iphan), que dependía de su cartera, aprobara un proyecto inmobiliario en Salvador de Bahia (noreste), donde posee un apartamento.
Y en una declaración a la Policía Federal divulgada por la prensa el jueves, Calero dijo que el propio Temer lo había presionado para buscar una solución a eso.
La oposición anunció que estudiaba presentar un pedido de impeachment de Temer, quien asumió el poder de forma provisoria en mayo y de forma definitiva el 31 de agosto, tras la destitución de la presidenta de izquierda Dilma Rousseff, acusada de maquillar las cuentas públicas.
Vieira Lima era un articulador clave del gobierno, que busca la aprobación por el Congreso de un paquete de duras medidas de austeridad para sanear las cuentas públicas y recuperar la confianza de los inversores, en un país que enfrenta su peor recesión en más de un siglo.
Las tensiones se ven acrecentadas por la firma inminente de un acuerdo de delación entre la justicia y miembros de la constructora Odebrecht, una de las mayores implicadas en el megaescándalo de Petrobras, que podría involucrar a dirigentes de casi todo el arco parlamentario.
La Bolsa de Sao Paulo abrió el viernes en baja y el real se devaluaba frente al dólar, ante la nueva incertidumbre política.
«Es todo consecuencia de este cuadro político. Se ve mucha inestabilidad, no se sabe qué puede pasar. Y como el mercado vive de estos rumores, reacciona con caídas ante este escenario inestable», comentó a la AFP el analista Claudio Oliveira, de la Corredora Futura en Sao Paulo.
«¿Cómo reaccionarían los inversionistas a una nueva caída de un gobierno en Brasil?», plantea.
Vieira Lima es el sexto ministro que Temer pierde por vinculación a escándalos de corrupción o por desavenencias internas.
Su salida y la de Calero se vieron precedidas por las de los titulares de Planificación, Transparencia y Turismo -que renunciaron en el primer mes de gestión al verse salpicados por el escándalo de corrupción en Petrobras- y a la del Abogado general de la Unión, que fue relevado en septiembre por discrepancias internas.