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En cadena nacional grabada el lunes
Samuel Amaya
@Samuel Amaya98
El presidente de la República Nayib Bukele se reunió con el Cuerpo Diplomático acreditado del país, la cual fue transmitida anoche por radio y televisión, en la expuso la versión oficial de lo sucedido la noche del sábado, cuando la Asamblea Legislativa destituyó a los integrantes de la Sala de lo Constitucional y al Fiscal General sin el debido proceso, que ha ocasionado condenas de la comunidad internacional.
A esta reunión no asistió el encargado de Negocios de la Embajada de Estados Unidos en El Salvador, Brendan O’Brien, lo que fue lamentado por el presidente en más de una ocasión.
En las casi dos horas que duró la reunión, el presidente Bukele recrimina a los representantes diplomáticos por lo que informan a sus gobiernos, y que fue por esa información que vinieron las condenas hacia su gobierno, por el rompimiento institucional.
Bukele intentó, en la mayor tiempo en más de una hora y media de su intervención, convencer a los diplomáticos que que lo que hicieron sus diputados fue producto del 28 de febrero. “El pueblo votó por eso. Los diputados llegaron a representar al pueblo y el pueblo quiere que quitemos a esos funcionarios. Enojados están porque no hemos quitado a otros”, expuso.
Según Bukele, los diputados de la Asamblea Legislativa leyeron 29 páginas de “causas específicas previamente establecidas por la ley”, esto para “cumplir” lo que dice el artículo 186 de la Constitución de la República para destituir a los magistrados de la Sala de lo Constitucional. El argumento que contenían dichas páginas eran las inconstitucionalidades a los decretos ejecutivos emitidos en 2020 para “contener la pandemia”. Bukele afirmó que por si él fuera, la Sala la hubiese “quitado desde el primer día”, al igual que al fiscal, pero tuvo que esperar a tener una Asamblea a su favor.
En algún momento, incluso, Bukele les dijo a los embajadores que “quería un fiscal afín”, por lo que la destitución de los miembros de la Sala debe interpretarse en la misma dirección, es decir, tener en la Sala “magistrados afines”.
Respecto a la destitución del fiscal general, Bukele puso de ejemplo las destituciones que hicieron otros países cuando llegaron al poder. Concretamente, ejemplifica las destituciones que hizo las administraciones de los Estados Unidos cuando gobernó Obama, Trump y Biden, sobre la separación de fiscal en su respectivo periodo. “Me extraña cuando hablo con países donde han hecho exactamente lo mismo y me dicen que está mal lo que estamos haciendo nosotros”, comentó Bukele. También comentó que la separación del fiscal se debió por tener “vínculos partidarios”.
Bukele también fustigó al Cuerpo Diplomático sobre las administraciones anteriores de El Salvador. Por ejemplo, “con los votos mayoritarios, tanto ARENA como el FMLN elegían la Corte Suprema de Justicia, el fiscal, aprobaban leyes, destituye magistrados y no había condenas internacionales”, apuntó el presidente. “Extraño que la comunidad internacional estuviera ausente de El Salvador, pero ya estaban las relaciones, ya había embajadas, y nadie les dijo nada”, reclamó Bukele.
De igual forma arremetió con los embajadores, ya que «están mal informando a sus países (porque solo escuchan una versión de los hechos) … «Les pasa lo mismo que al Enviado Especial (de Estados Unidos), que se reúne con la oposición y le cuentan ‘no sé qué sandeces’ sin escuchar la otra parte», cuestionó.
En la breve intervención del embajador de la Unión Europea, Bassols, de forma breve pero categórica respondió al presidente Bukele que no se había reunido con los opositores para transmitir de lo sucedido, sino con cinco constitucionalistas que coincidieron en que lo ocurrido el sábado fue “era discutible la destitución de los magistrados, que el nombramiento de los nuevos magistrados también era ilegal, y que verlo por la televisión fue chocante”. Además, leyó al menos tres párrafos de la condena de la Unión Europea.
La embajadora de Canadá también dejó sentada su preocupación por la separación de poderes, y la gravedad de la sustitución de los magistrados de la Sala, en tanto máximo tribunal de justicia.
