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Joaquín Salazar
@JoakinSalazar
Como “la decisión más importante”, califica Walter Durán, embajador de El Salvador en la República Popular China, la apertura de las relaciones diplomáticas con el gigante asiático. Es el legado que el presidente Salvador Sánchez Cerén, deja al pueblo salvadoreño en materia de diplomacia internacional.
Pese a las opiniones encontradas que califican de positivo y negativo la apertura de relaciones con China Popular, sin duda alguno esta ha sido una de las decisiones más importantes por parte del Gobierno de Sánchez Cerén, dando al país oportunidades para la inversión, intercambio comercial y cooperación con una del as naciones consideradas como potencia mundial. Ya que tiene un mercado que supera los mil 400 millones de personas.
Walter Durán, embajador salvadoreño, acreditado en China Popular, hizo un consolidado de los logros que se han generado con esta decisión, que ya suma nueve meses desde la aceptación del criterio de una sola china.
“En estos nueve meses se ha ido profundizando aceleradamente el encuentro de nuestros dos países, tanto en el ámbito económico y cooperación China ha sido un país solidario con diversos países del mundo incluso su visión de la Franja y la Ruta de la Seda, que busca unir las fuerzas económicas del mundo, pero bajo un enfoque de respeto mutuo, desarrollo recíproco y una relación de ganar-ganar. Bajo esa perspectiva es que se ha abierto las relaciones con El Salvador”, explicó.
Agregó, que el gigante asiático ha sido generoso con El Salvador, a través del apoyo en temas delicados como las consecuencias de la sequía y posteriores lluvias del año pasado, un contingente de cincuenta vehículos para apoyo de seguridad. Además, de la donación de computadoras para las escuelas y las tres mil toneladas de arroz.
Que forman parte de un apoyo económico no reembolsable que el presidente Xi Jinping, aprobó por mil millones de yuanes; y lo único que ha pedido China Popular, es que se reconozca el principio de una sola China que se respete su relación con Taiwán.
Sin embargo, el diplomático enfatizó que existe otras áreas menos conocidas, que ya están fortaleciéndose como el intercambio comercial en azúcar y café, productos nativos que empresarios de China han mostrado interés. De igual manera el gigante asiático ha nombrado a El Salvador, como un destino turístico, por lo que actualmente, una delegación china viajó al país para establecer posibles rutas turísticas.
Durán enfatizó que: “el legado que el Presidente Salvador Sánchez Cerén, deja en materia diplomática es la apertura con la segunda potencia del mundo, una relación estratégica técnica que cualquier gobierno, de cualquier tinte político, lo va a recibir positivamente”, motivo por el que reconoció que el presidente electo, Nayib Bukele, fortalecerá esta relación diplomática, ya que considera que este tiene la sabiduría para poder profundizar este lazo de amistad, que se abrió con el presidente Sánchez Cerén. Este gobierno tendrá a su disposición más de 130 millones de dólares, fondos no reembolsables de China Popular.
