Roma/AFP
El Banco Central Europeo (BCE) solicitó un plan de rescate de 8.800 millones de euros para el banco Monte dei Paschi di Siena (BMPS), frente a los 5.000 millones previstos inicialmente, operación que deberá ser financiada esencialmente con fondos públicos italianos.
El banco italiano indicó que había recibido esa información del BCE a través de las cartas enviadas a los ministerios de Finanzas y Economía italianos.
El gobierno anunció la semana pasada la puesta en marcha de un plan de rescate que convertiría al tesoro público en el principal accionista del banco.
Los préstamos dudosos pesan sobre la tercera institución financiera de Italia, el banco más antiguo del mundo, fundado en Toscana durante la Edad Media.
El 23 de noviembre, el BCE calculó que el banco italiano necesitaba un capital de 5.000 millones de euros, pero en base a los resultados de las pruebas de resistencia realizadas en el 2016 considera que la cifra debe ser mayor, de 8.800 millones de euros.
La liquidez del banco se deterioró rápidamente entre el 30 de noviembre y 21 de diciembre.
El banco toscano se encontraba en el grupo de 51 bancos europeos evaluados en función de las pruebas.
El diario financiero italiano «Il Sole 24 Ore», calcula en su edición del lunes que el Estado italiano deberá invertir «unos 6.000 millones de euros».
El resto debe provenir principalmente de la conversión forzada de las obligaciones en acciones, pagadas al 75% de su valor nominal a los inversores institucionales y al 100% a los 40.000 ahorradores.
«El banco será en práctica nacionalizado, ya que más del 67% va a terminar en manos del Estado», calcula «Il Sole 24 Ore».
El diario italiano califica de «tratamiento griego» el rescate que será aplicado al BMPS.
El gobierno italiano aprobó la madrugada del viernes pasado durante una reunión extraordinaria un decreto que autoriza al ministerio del Tesoro a convertirse en el mayor accionista del Banco Monte dei Paschi di Siena (BMP),
La decisión fue tomada tras el fracaso de la entidad en su intento de captar los 5.000 millones de euros necesarios para su recapitalización.
Título suspendido
En la Bolsa de Milán, el título BMPS está suspendido desde el viernes.
Para el italiano Ignazio Angeloni, de la junta que supervisa el BCE, «la intervención pública de un banco es siempre la última opción, sujeta a normas muy estrictas», aseguró.
«Los dirigentes del banco italiano han trabajado en los últimos meses en varias soluciones, hemos seguido de cerca su trabajo», sostiene Angeloni, quien considera que la intervención del Estado «era necesaria», admitió en una entrevista al diario La Stampa.
Fundado en Siena en 1472 como casa de empeño para ayudar a los pobres, el BMPS se desarrolló hasta convertirse en la tercera institución financiera italiana.
El BMPS navega en aguas turbulentas desde hace años. Debilitado por la desastrosa adquisición del banco Antonveneta en 2007 y por un escándalo de malversación de fondos, ha acumulado pérdidas (14.000 millones de euros entre 2011 y 2015) y ha tenido que realizar dos aumentos de capital, por un total de 8.000 millones de euros, dinero que ya se esfumó.
La delicada operación marca el inicio de un rescate del sistema bancario de la península, uno de los más débiles en Europa.
El Parlamento italiano aprobó la semana pasada la creación de un fondo de 20 millones de euros para el rescate de los bancos con problemas, lo que probablemente aumentará la deuda pública.
El sector bancario italiano preocupa a Europa debido a su fragmentación, con 700 sedes, el elevado número de préstamos dudosos(360.000 millones de euros, es decir, casi un tercio del total de la zona euro ) y su insuficiente capitalización.
El decreto aprobado ofrece una compensación a los pequeños ahorradores por la pérdida de valor de sus bonos debido a la conversión forzada de los títulos de BMPS durante el proceso de recapitalización preventiva.
El año pasado, el rescate con fondos públicos de cuatro bancos pequeños se tradujo en fuertes pérdidas para miles de ahorristas, lo que provocó protestas y al menos un suicidio.