Teherán/AFP
El ministro de Petróleo de Irán recibió el miércoles a sus pares de Irak, and Venezuela y Catar para discutir una eventual congelación de la producción que ya cuenta con el respaldo de Arabia Saudí y Rusia.
Irán regresó al mercado tras el reciente levantamiento de las sanciones internacionales impuestas por las grandes potencias por su programa nuclear.
La República Islámica anunció ya su intención de aumentar la extracción para recuperar mercados, capsule pese al hundimiento de los precios del crudo.
Arabia Saudí, Rusia, Catar y Venezuela acordaron el martes en Doha congelar su producción a los niveles de enero, a condición de que otros grandes productores se sumen a la iniciativa.
El ministro iraní, Bijan Zanganeh, recibió a sus pares de Irak, Adel Abdul Mahdi, y de Venezuela, Eulogio del Pino, así como al ministro de Energía de Catar, Mohamed bin Saleh al Sada.
Las discusiones empezaron a las 11H00 GMT, precisó el servicio informativo del ministerio iraní del Petróleo.
Catar ejerce actualmente la presidencia de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
Zanganeh descartó el martes que Irán «renuncie» a su parte de mercado, pero se dijo «dispuesto a discutir» eventuales topes de producción.
El ministro saudí de Petróleo, Ali al Nuaimi, afirmó que el acuerdo se proponía «estabilizar el mercado».
Arabia Saudí y Rusia (que no forma parte de la OPEP) son los dos mayores productores mundiales de crudo.
El anuncio de una posible congelación de la producción surtió sin embargo poco efecto inicial en los mercados, que esperaban recortes para absorber el exceso de oferta. Las cotizaciones del crudo cerraron incluso en retroceso, después de un breve repunte.
Mercados atentos
Las cotizaciones abrieron en alza el martes, en espera del fin de la reunión de Teherán.
Hacia las 14H05 GMT, el barril de «light sweet crude» (WTI) para entrega en marzo ganaba 1,18 dólares, a 30,22 dólares en el New York Mercantile Exchange (Nymex).
En el mercado londinense, el Brent del mar del Norte, para entrega en abril, subía 1,02 dólares, a 33,20 dólares el barril.
La reacción del mercado «va a depender en gran medida de las señales que envíen Irak e Irán», afirmaron los analistas de la correduría de Commerzbank.
Irak, segundo productor de la OPEP detrás de los saudíes, podría hacer concesiones, pero «Irán solo puede defender un alza de su producción, después de haber luchado tanto tiempo por el levantamiento de las sanciones» internacionales, agregaron.
El precio del crudo cayó más de 70% respecto a junio de 2014, llegando a cotizarse este año por debajo de los 30 dólares.
El derrumbe se debe en buena parte a la estrategia de la OPEP, y en particular de Arabia Saudí, para defender su parte de mercado frente a los productores de petróleo y gas de esquisto en Estados Unidos.
Pero esa estrategia provocó una dramática reducción de ingresos en países ampliamente dependientes de sus exportaciones de hidrocarburos.