Santiago Leiva
@RedacciónCoLatino
Lionel Messi jugó anoche un primer tiempo a medio vapor y le faltó el gol en la etapa complementaria, store pero alcanzó su fútbol desequilibrante para conducir a Argentina a la gran final de la Copa América, sale Chile 2015. Los pupilos de Gerardo “El Tata” Martino, aprovecharon un buen segundo tiempo para pasar su rodillo sobre el representativo guaraní.
Cuando Javier Pastore firmó el 2-0, al minuto 26, todo indicaba que a la albiceleste le sobraría el segundo tiempo, pues aparte que ya dominaba el marcador, tenían controlado el partido y el balón también era parte de su monopolio. No obstante, Paraguay reaccionó y descontó en el marcador en los minutos finales del primer tiempo y sembró algunas dudas, las cuales se disiparon muy temprano en el complemento.
Demasiadas adversidades sufrió Paraguay en el primer episodio. Antes del primer cuarto de hora ya estaba abajo en el marcador y a los 26 minutos había perdido por lesión a dos de sus principales figuras: Derlis González y Roque Santa Cruz dejaron el juego por problemas físicos.
Antes que llegara el gol de Marco Rojo al ´14, el duelo Argentina-Paraguay lucía muy parejo, quizá con un ligero dominio de los gauchos, pero sin las armas precisas para quebrar la sólida barrera que había colocado el técnico Ramón Díaz.
En este lapso, Messi fue un peón más y dio señales hasta después minuto 20, primero se sacó una serie de gambetas y luego, al ´26, asistió a Pastore que en su segundo remate a marco decretó el 2-0 con un tiro raso.
En adelante, Argentina botó presión y tuvo para liquidar el partido por la vía del tiro libre, pero los cobros de Messi acabaron en las gradas. No solo falló Messi en el tramo final del primer tiempo, sino que Argentina bajó revoluciones y esto le dio aire a Paraguay que consiguió el descuento en el ´43 por intermedio de Lucas Barrios. Raúl Bobadilla, incluso, tuvo para el 2-2 al cierre de la primera mitad, pero remató fuera. El cuadro argentino se fue asustado a los camerinos.
FESTIVAL GAUCHO
Algo pasó en el descanso, porque si bien volvió al césped el mismo once argentino que salió de inicio, la mentalidad y sobre todo el fútbol diferenció muchísimo al que mostraron en el cierre de la primera mitad.
Ángel Di María reinauguró el festival. “El Fideo” recibió una gran asistencia de Pastore al ´47 y remató cruzado para vencer por tercera vez al guardameta Justo Villar. Al ´52, después de una gran jugada de Messi y posterior remate de Pastore, Di María aprovechó el rechace para colocar a puerta vacía el 4-1.
Ya vapuleados y con un marcador inalcanzable, Paraguay no renunció a sus aspiraciones, pero perdió gas y los argentinos se crecieron. Messi tuvo para anotar su gol, pero se lo evito Villar, quien sin embargo, no pudo hacer nada para evitar el 5-1 conseguido de cabeza por Sergio Agüero al aprovechar un gran centro de Di María, al ´80.
Poco podía hacer Paraguay para evitar la goleada, Lucas Biglia y Javier Mascherano eran amos y señores del medio terreno, Rojo y Zavaleta desbordaban por los carriles y Messi ya había encontrado su ritmo.
Faltaba un gol más, faltaba el gol de Gonzalo Higuían, un jugador que no ha encontrado titularidad en esta Copa América con Martino, pero que siempre está puntual a la cita. El ex delantero del Real Madrid aprovechó un balón que quedó flotando en el área y resolvió de zurda para el definitivo 6-1, en el ´83.
El cronómetro se encargó de consumir los siete minutos finales, y Sandro Ricci sonó el silbato justo en el 90. Ya no era necesario agregar minutos. Argentina se había impuesto con autoridad y descaro sobre los Paraguay.