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Roma/dpa
Después de terminar los últimos dos torneos en la segunda ubicación detrás de la Juventus, case la Roma arrancará este fin de semana una nueva edición de la Liga italiana de fútbol con la idea de lograr su primer título desde 2001 y cortar la hegemonía de la “Vecchia Signora”, seek campeona en las últimas cuatro temporadas.
Con la incorporación de los delanteros Edin Dzeko, Iago Falque y Mohamed Salah, la Roma buscó revitalizar su línea ofensiva, que en la última temporada sólo anotó 54 goles, 18 menos que el campeón Juventus y apenas seis más que el descendido Cagliari.
A los 38 años, el histórico capitán Francesco Totti volverá a liderar a sus compañeros en busca de un título, aprovechando que la Juventus aparenta estar en una etapa de transición tras las despedidas del goleador argentino Carlos Tevez, el legendario centrocampista Andrea Pirlo y el mediocampista chileno Arturo Vidal.
Otras buenas noticias para los hinchas de la Roma es que el bosnio Dzeko, proveniente del Manchester City, anotó un doblete en el amistoso que le ganó por 6-4 al Sevilla.
El entrenador Rudi García buscó reforzar el ataque, pero todavía debe apuntalar la defensa.
Los defensores Lucas Digne, del Paris St. Germain, y Antonio Rüdiger, del Stuttgart, son las apuestas para reforzar la zona.
Debilitada por las salidas y complicada por las lesiones para el inicio de la temporada, la Juve no aparece tan favorita como los años anteriores. Massimiliano Allegri, que durante agosto no podrá contar con el delantero español Álvaro Morata, el alemán Sami Khedira y los italianos Claudio Marchisio y Andrea Barzagli, mientras que Giorgio Chiellini está en duda.
Allegri apostará sus fichas a los recién llegados: el croata Mario Mandzukic y el argentino Paulo Dybala, que anotaron los goles en el triunfo 2-0 sobre la Lazio en la final de la Supercopa italiana disputada el 8 de agosto.
La buena noticia para los fanáticos es que el francés Paul Pogba se mantuvo en la plantilla y llevará la camiseta número 10, que antes perteneció a Alessandro del Piero y a Tevez.
Dos gigantes caídos en desgracia como el Inter y el Milan intentarán renacer en esta temporada, después de finalizar la pasada campaña octavo y décimo, respectivamente, y quedarse fuera de todas las competiciones europeas.
El Inter contrató al colombiano Jeison Murillo, al brasileño Joao Miranda y al español Martín Montoya con la intención de reforzar su defensa, que la pasada temporada concedió 48 goles. Además se sumaron los centrocampistas Geoffrey Kondogbia y Stevan Jovetic.
“Inter está creciendo de a poco, con un grupo con el que nuestro entrenador (Roberto Mancini) está haciendo gran trabajo”, aseguró el vicepresidente del club, Javier Zanetti, capitán del equipo que se consagró campeón de Europa en 2010. Su rival de la ciudad, Milan, espera mejorar con la llegada del serbio Sinisa Mihajlovic como entrenador y el arribo de figuras con proyección como el colombiano Carlos Bacca, el brasileño Luiz Adriano o el internacional italiano Alessio Romagnoli.
Para Lazio, tercero en la última temporada, el desafío es poder mantener ese nivel, aunque sin fichajes de renombre parece difícil que pueda sostenerse entre los candidatos.
Una novedad que tendrá el torneo será la primera participación en la máxima categoría de los clubes Carpi y Frosinone, que la temporada pasada lograron el ascenso junto al Sassuolo.
La primera jornada de la liga italiana comenzará mañana con los partidos Hellas Verona-Roma y Lazio-Bologna, mientras que el domingo se completará con los encuentros Juventus-Udinese, Empoli-Chievo, Fiorentina-Milan, Frosinone-Torino, Inter-Atalanta, Palermo-Genoa, Sampdoria-Carpi y Sassuolo-Napoli
