@DiarioCoLatino
Despidos masivos, vetos presidenciales y recortes a programas sociales son algunas de las medidas que fueron criticadas por los Profesionales por la Transformación de El Salvador (PROES), en el marco de los 28 años de la firma de los Acuerdos de Paz, y aseguraron que representan un retroceso a la democracia del país.
Uno de estos principales retrocesos ha sido el despido arbitrario de 5,887 empleadas y empleados públicos en veintiséis dependencias de Gobierno, incluyendo mujeres embarazadas, personas con enfermedades crónicas, con discapacidad y personas a quienes les hacía falta menos de dos años de servicio para jubilarse.
Asimismo, PROES destaca que el gobierno de Nayib Bukele busca un retroceso en beneficios para los salvadoreños a través de vetos presidenciales, como la ayuda compensatoria al personal docente en proceso de jubilación. Además, denuncian un desmontaje de la Reforma de Salud con el cierre de ECOSF, iniciativas para llevar salud a cantones lejanos del país.
En el presupuesto 2020 se dejan sin recursos trece programas, entre ellos el de fortalecimiento de la salud de la mujer, el de alfabetización y los dirigidos a la población campesina.
También se recortan los programas Ciudad Mujer, bono para la educación y salud, Pensión Básica y Paquetes Agrícolas, así como el subsidio del gas, con un recorte de $9 millones.
De igual manera, PROES destaca que hasta la fecha se desconoce un plan que permita valorar sus propósitos y metas para el quinquenio. No se conocen las fases del llamado plan de seguridad, ni algunos acuerdos establecidos con otros Estados.
Además, destacan que el gobierno de Bukele se basa en la improvisación, falta de transparencia e incapacidad para ejecutar acciones. “Muchas instituciones del Estado tienen un funcionamiento caótico, no hay cuentas claras de algunas inversiones, como la del puente provisional en el río Torola, ni de viajes al exterior de familiares del presidente y algunos funcionarios”, explicaron a través del comunicado. Denunciaron que muchos funcionarios utilizan sus cargos para dedicarse a hacer proselitismo político, promover la afiliación a su partido y calumniar a sus adversarios políticos.
En cuanto a la política exterior, PROES explicó que el Gobierno está completamente alineado con Estados Unidos y de confrontación con los gobiernos de izquierda y progresistas.
“El Gobierno genera tensión en la propia región centroamericana, que es la más importante para nuestro país. Incluso suscribe acuerdos migratorios que afectan a nuestra población emigrante, a la que se le niega el derecho a pedir refugio en Estados Unidos y se le deporta de ese país”, agregan.
En el ámbito económico, PROES asegura que el país tiene pérdida de dinamismo de la economía, a pesar de que las exportaciones y remesas mejoraron, pues para mayo 2019 las exportaciones habían caído -1 % y las remesas solo crecieron 3.8 %, mientras que para noviembre aumentaron 0.1 % y 4.8 %, respectivamente.
La desaceleración económica se registra en las siguientes variables internas: el consumo, que disminuyó por los despidos en el sector público, por el congelamiento salarial y la pérdida de dinamismo del crédito a los hogares, que entre enero y mayo había crecido 6 % y para noviembre solo creció 3.7 %.
Asimismo, la inversión privada, que se vio afectada por la reducción del consumo. Entre enero y mayo, el crédito a las empresas aumentó 10 % con respecto al mismo período del año pasado y para noviembre solo creció 5 %. Las importaciones de maquinarias y equipos, que aumentaron 4.8 % hasta mayo, solo crecieron 1.5 % hasta noviembre.
El Banco Central de Reserva (BCR) afirmó que la inversión extranjera fue de $438 millones al tercer trimestre de 2019, y reconoció que “respecto al año previo, el ingreso neto fue menor en 21.0 %”.