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Rusia registró el año pasado un superávit en su balance comercial con China, es decir, las ventas de productos rusos a Pekín superaron al total de productos chinos importados por Moscú, según se desprende de un comunicado del Servicio Federal Ruso de Aduanas.
Las exportaciones rusas a China alcanzaron los 56.000 millones de dólares, mientras que Rusia importó mercancías chinas por valor de 52.200 millones. Estas cifras sitúan el intercambio comercial total entre Moscú y Pekín en 108.200 millones.
La última vez que Rusia mostró un superávit comercial con China fue en 2006, cuando el intercambio fue un 63% menor que el del año pasado. También es la primera vez que el comercio bilateral ha superado los 100.000 millones de dólares.
China sigue siendo el principal socio comercial de Rusia, seguida por Alemania, con la cual Rusia tiene un superávit de 8.600 millones de dólares del intercambio total de 59.600 millones.
El tercer lugar lo ocupan los Países Bajos, con un superávit de 39.700 millones a favor de Rusia para un intercambio de 47.100 millones.