Telesur
De acuerdo al portavoz presidencial, Dmitry Peskov, Rusia «es capaz de resistir la confrontación actual con Occidente», en referencia a las rondas de sanciones aplicadas por potencias occidentales encabezadas por la Unión Europea y Estados Unidos tras el inicio del conflicto en Ucrania, hace casi dos meses.
Los países occidentales han continuado la imposición de nuevas sanciones contra Moscú en respuesta a la operación especial del ejército ruso en Ucrania. Hasta ahora han sido, principalmente el sector financiero y la oferta de productos de alta tecnología los que se vieron afectados.
Además, algunos países europeos han anunciado su intención de reducir su dependencia del suministro energético ruso en un futuro previsible. El Kremlin llamó a estas medidas una guerra económica, como la que aún no ha habido, pero enfatizó que estaban listos para tal desarrollo de eventos.
Peskov recordó que el Banco Central de Rusia tomó medidas para estabilizar la situación en el mercado de divisas; los pagos por el suministro de gas a países hostiles se transfirieron a rublos.
Además, el Gobierno ha preparado un plan para contrarrestar las medidas restrictivas, que incluye un centenar de iniciativas. El monto de su financiación será por el equivalente de 12.000 millones de dólares.
Al mismo tiempo, denunció que la presión de las sanciones sobre Moscú se convirtió en problemas económicos para Estados Unidos y Europa, provocando un grave aumento en los precios de los combustibles y los alimentos.
Las restricciones incluyen la desconexión parcial de Rusia del sistema SWIFT, la congelación de sus reservas internacionales, el embargo sobre la importación de algunos agentes energéticos, así como el cierre del espacio aéreo, puertos y carreteras para transportistas rusos.
Por su parte, la jefa de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen cree que las sanciones occidentales provocarán un default en Rusia y anunció que las sanciones contra Rusia «se fortalecían cada semana», como resultado, es poco probable que Rusia evite un incumplimiento.
«Cada semana, las sanciones están afectando más profundamente a la economía rusa: las exportaciones se han derrumbado en un 70 por ciento. Según nuestras previsiones, el PIB se derrumbará en un 11 por ciento. La quiebra nacional de Rusia es solo cuestión de tiempo».