Moscú/Prensa Latina
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, aprobó un decreto que establece medidas de respuesta en materia de visados en relación con las acciones inamistosas de Estados extranjeros, publicó hoy el portal nacional de información jurídica.
La decisión fue tomada por la necesidad de responder de manera urgente ante las sanciones de la Unión Europea (UE) y la implementación del texto suspende cláusulas de los acuerdos de expedición simplificada de visados con el bloque comunitario, Noruega, Dinamarca, Islandia, Suiza y Liechtenstein.
Según el documento, se eliminan algunas disposiciones del Acuerdo entre la UE y Rusia sobre la facilitación de la expedición de visados a los ciudadanos del 25 de mayo de 2006.
En especial, se suprimen los procedimientos simplificados de presentación de documentos sobre el motivo del viaje y los visados de entrada múltiple por un año para las delegaciones oficiales y los periodistas.
Moscú suspende también los visados de entrada múltiple por cinco años para los miembros de los Gobiernos nacionales y regionales, los Parlamentos y los tribunales.
El decreto excluye además la exención de las tasas de visado para las delegaciones oficiales y los miembros de los Gobiernos y Parlamentos, así como la entrada sin visado para los titulares de pasaportes diplomáticos.
Las autoridades nacionales aprobaron en las últimas semanas un grupo de disposiciones políticas, económicas y financieras para hacerle frente a las más de seis mil 300 medidas aplicadas contra el país, en su mayoría luego del inicio de la operación militar en Ucrania.
Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Japón, Australia y los países de la Unión Europea impusieron sanciones a Rusia, apuntando a sectores clave del comercio, las finanzas, la energía, las exportaciones, la aviación y el espacio.
Las restricciones incluyeron la desconexión parcial de bancos rusos del sistema internacional de pagos Swift, el cierre del espacio aéreo para sus aerolíneas, la congelación de las reservas internacionales del Banco Central de Rusia y el embargo a las compras de petróleo por Washington.
Rusia comenzó el pasado 24 de febrero una operación militar en Ucrania, luego que las autoridades de las autoproclamadas Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk le solicitaran ayuda para repeler el aumento de la agresión y los intensos bombardeos por parte de Kiev.
Antes, Moscú reconoció la independencia y soberanía de ambos territorios y firmó tratados de amistad, cooperación y asistencia mutua con sus líderes, los cuales incluyeron el establecimiento de relaciones diplomáticas y la ayuda militar.
En su discurso para informar sobre el operativo, el presidente ruso, Vladimir Putin, afirmó que el objetivo es proteger a la población de Donbass de los abusos y el genocidio de Kiev durante los últimos ocho años, además de “desmilitarizar” y “desnazificar” Ucrania.