Madrid/España/AFP
¡Y Mohamed Salah se tomó la revancha¡ El goleador egipcio llevó este sábado al Liverpool a ganar su sexta Liga de Campeones al imponerse 2-0 al Tottenham en el estadio Metropolitano madrileño, cortando el sueño de los londinenses.
Salah abrió el marcador de penal (2), antes de que Divock Origi rubricara el 2-0 (87) que permitió al Liverpool volver a levantar la ‘Orejona’ catorce años después de la final que ganó en 2005 al Milán y de paso, romper la maldición de su técnico Jurgen Klopp.
El alemán logró alzar su primer Liga de Campeones, tras dos finales de Champions fallidas, la última el pasado año frente al Real Madrid, al que este sábado ha arrebatado el cetro continental.
En una final que comenzó con un emotivo minuto de silencio por la muerte del internacional español José Antonio Reyes este sábado en un accidente de tráfico, el ganador empezó a dibujarse pronto.
El balón apenas había empezado a rodar cuando el encuentro se encaminó hacia la victoria de los Reds.
Un balón levantado en el área por Sadio Mané, lo interceptó Moussa Sissoko con el brazo, sin que el árbitro dudara en señalar la pena máxima, que Salah se encargó de transformar (2) para alegría de los miles de aficionados Reds presentes en el Metropolitano madrileño.
– Segundo gol más rápido –
El egipcio entraba así en los anales de la Champions al marcar el segundo tanto más rápido en una final del máximo torneo continental de clubes.
De paso se tomaba la revancha de la final del pasado año ante el Real Madrid, en la que tuvo que salir lesionado en un hombro tras una entrada de Sergio Ramos.
El tanto fue un auténtico mazazo para el Tottenham, que jugó atenazado durante prácticamente todo el partido, temeroso de cometer un error que pudiera costarle el segundo y despertando sólo en los últimos minutos del encuentro.