Rebeca Henríquez
@RebeHenriquez
“El santo más poeta y el poeta más santo”, esta frase hace alusión a San Juan de Cruz, el poeta místico del renacimiento español, patrono de los mismos, y al que cada 14 de diciembre la iglesia católica conmemora, una persona muy profunda en su experiencia con Dios y que utilizó la poesía para comunicar la experiencia de lo divino; de la trascendencia con Dios, en la persona, en el alma, a través de las letras.
Según el fray Nelson Murillo, de la Parroquia San Juan de la Cruz, gracias al itinerario del patrono de los poetas se puede profundizar en los caminos del espíritu de Dios, y son pocos los santos que a través de su vida logran plasmar en sus escritos la experiencia profunda en la religión, y, además, plasmar una guía espiritual donde el ser humano puede encontrarse consigo mismo.
“Los santos que ahondaron en las profundidades del ser, de la trascendencia, del misterio de Dios, no tienen más recursos que acudir al lenguaje poético. La poesía expresa en lenguaje humano lo más sublime, lo más alto, lo más trascendente, por eso San Juan de la Cruz desarrolla una poesía mística muy única, profunda, porque a él le une la experiencia profunda de Dios, la experiencia de encontrarse a Dios ahí en medio del seguimiento a través del camino de la cruz, de ahí viene y adopta ese nombre San Juan de la Cruz”, destacó Murillo.
Según el religioso, la frase “el santo más poeta y el poeta más santo” se convierte en la descripción gráfica y plena del santo, no solo a nivel espiritual, sino que también a través del arte y de lo que puede significar la poesía para el ser humano.
Murillo señaló que los escritos del santo donde muestra principalmente la radicalidad del seguimiento de Jesús, la importancia y la urgencia que tiene de abrazar de manera coherente y el seguimiento, la fe y reconocer cómo son los caminos del espíritu, son porque muchas veces se cree que son de una manera, cuando es totalmente lo contrario, y se desconocen los caminos del señor o cómo él actúa, y es ahí es donde entra la enseñanza de San Juan de la Cruz, de saber purificar el alma.
La literatura de San Juan de la Cruz se caracteriza por ser mística, breve, intensa y profunda con un estilo sencillo y limpio que emplea con mucha frecuencia la lira y los romances. Expresa su vivencia contemplativa y comunión espiritual en busca de la reconciliación de los hombres con Dios.
San Juan de la cruz fue un escritor místico que experimentó su vivencia religiosa y las compartió a sus similares, fue beatificado en 1967 por el papa Clemente X y canonizado en 1726 por el papa Benedicto XIII, posteriormente en 1926 fue declarado doctor de la iglesia universal y patrono de los poetas españoles en 1952. En esta ocasión la parroquia del país que lleva su nombre, conmemoró su día con una misa solemne.