Por: Rolando Alvarenga
Con tantos años de andar en este mundo del deporte, tadalafil puedo sostener que, por historia, por triunfos trascendentales, por ser sede de los grandes eventos deportivos nacionales e internacionales, por ser la cuna de la mayoría de atletas y equipos federados, por sus escenarios deportivos y una serie de etcéteras, San Salvador ha sido, es y seguirá siendo “la capital del deporte salvadoreño”.
Si alguien afirma lo contrario, estará pronunciando un indigerible disparate, quedando al desnudo en torno a sus pocos conocimientos deportivos y accesando al podio de los perdidos en materia deportiva. Y es que no bastan unos minutos de fama o de buenos resultados parar querer optar a tan alto privilegio.
Como machito con voz de trueno, sin nada que ver con el chico del apartamento 5-12, y pocos pelos en el pecho, puedo sostener que ser la capital del deporte es algo integralmente muy grande y que no veo en el horizonte a alguna ciudad o departamento con posibilidades reales de destronar a San Salvador. Es que, a través de los años, San Salvador ha sido el epicentro de la auténtica “salsa deportiva”.
Decir lo contrario es como querer comparar climatológicamente a San Miguel con Santa Tecla; el Estadio Cuscatlán, con el de Las Delicias o, en el aspecto laborioso, pretender ubicar en el mismo nivel a hondureños con salvadoreños, cuando ya sabemos la fama de los unos y los otros. O, con más contrastante y de mal gusto, como querer comparar al Frente con Arena ¡nada que ver!
Un caché y prestigio que apunta a fortalecerse con la visión de una nueva cúpula en la dirigencia del Instituto Municipal de Deporte y Recreación (IMDER), que, ad honorem, preside Yamil Bukele. Una gestión que ha venido ejecutando una política deportiva diferente en San Salvador en beneficio, completamente gratis, de una impresionante cantidad de comunidades. Y todo gracias al Concejo Edilicio que encabeza Nayib Bukele.
Una gestión visionaria que, a partir de un Plan Estratégico (2015-2025), ha firmado un Acuerdo de Cooperación con la Liga de Fútbol Profesional de España que ya empezó a capacitar a su personal técnico para llevar sus conocimientos teórico-prácticos a sus programas de fútbol municipal.
Pero no solo eso, el IMDER también ha tendido de la mano a varias federaciones como baloncesto, boxeo, natación, luchas, voleibol y artes marciales. Y, gracias a esas alianzas, es que el IMDER apoyó el Open Continental de Judo; la IV Copa Mundial de Esgrima; el Mundial de Físicoculturismo y Fitness y varios eventos de jerarquía internacional.
En síntesis, en el marco de las aspiraciones de fortalecer el deporte municipal capitalino en sus niveles recreativo, de desarrollo y para la alta competencia, el IMDER aspira a reconfirmar a San Salvador como “la capital de los grandes espectáculos deportivos”. ¡Otra versión es pura paja!