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Yaneth Estrada
@caricheop
Pablo (nombre ficticio), de 26 años, fue víctima de la violencia social cuando trabajaba como motorista del transporte colectivo. Fue agredido con arma de fuego por varias personas desconocidas y fue impactado de bala; su vida cambió radicalmente, pues iniciaba un largo camino por recuperar su vida y la de su familia.
Pablo fue intervenido en el Hospital Nacional Dr. Juan José Fernández “Zacamil” por personal capacitado como intervencionista del programa “Sanando Heridas”, logrando así la estabilización física y emocional a través de procedimientos médicos que iban de la mano de técnicas de contención emocional que apoyaron el afrontamiento de este evento traumático de manera positiva e informada. Las estadísticas indican que en El Salvador se han atendido cerca de 3,499 pacientes por lesiones causadas por violencia social en el sistema hospitalario de salud pública, lo que representa un costo por víctima de cerca de $3,18 y un costo total en salud para el Estado de $11.13 millones.
El programa “Sanando Heridas” es un programa de Glasswing Internacional, que es una organización sin fines de lucro en Centroamérica, y busca abordar las causas fundamentales de la pobreza y la violencia a través de programas de educación y salud. También cuenta con una asistencia integrada por 38 organizaciones de la sociedad civil y organismos públicos que proveen servicios complementarios para la recuperación de la persona; el costo total de la inversión es de $597,285.75 financiados por el fondo especial de Japón, a través del BID, durante el período 2016-2019.
El programa tiene un enfoque integrado de prevención de violencia desde una perspectiva de salud pública, y en El Salvador “Sanando Heridas” ejecutó su primera etapa en el Hospital Nacional San Rafael, en La Libertad y el Hospital Nacional Dr. Martín Villacorta, en Sonsonate. Actualmente, el programa se encuentra en el Hospital Nacional Enf. Angélica Vidal de Naranjo, en San Bartolo, San Salvador y en el Hospital Nacional Dr. Juan José Fernández en Zacamil, San Salvador.
Creando oportunidades
De acuerdo a esta organización, hasta el momento se ha atendido a 800 personas y de estas un 97 % de casos han mostrado mejora en su estado emocional. Asimismo, más de 1,300 profesionales de la salud de hospitales y de unidades de salud familiar comunitarias fueron capacitados en atención integral al trauma, con más de 400 representantes de organizaciones capacitadas y más de 400 participantes del programa fueron enlazados a organizaciones del sistema de referencia, con doce Comités de Bienestar Emocional.
“La violencia es un problema que puede prevenirse. Personas expuestas a altos niveles de violencia y victimización están fuertemente asociadas con actos de violencia posteriores al primer trauma vivido por el mismo motivo”, explicó Natalia Salcedo, directora de país de Glasswing Internacional.
En la presentación de los resultados parciales sobre el programa y su estudio de impacto se destacó, que de las personas que han sido víctimas de actos de violencia y han sido intervenidas por especialistas de “Sanando Heridas”, reducen su probabilidad de reincidencia de un acto violento hasta un 30 %.
