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Gloria Silvia Orellana
@GloriaCoLatino
“¡Pan para tu matata!” es la campaña de promoción de prácticas nutricionales saludables que desarrolla Save the Children y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), en el marco de la Emergencia Nacional por la pandemia de COVID-19, a fin de procurar alimentación saludable a la niñez y adolescencia, así como guías a las madres, padres y personas encargadas del cuido de estos grupos poblacionales.
El concepto que destacará esta campaña digital es el refrán salvadoreño “pan para mi matata”, aludiendo el consejo de “tomar en cuenta” conocimiento y aspectos cotidianos de la vida, a fin de contribuir en la apropiación de hábitos de alimentación saludable, plantean Save the Children y UNICEF.
La relevancia de una alimentación y nutrición infantil que cumpla de forma equilibrada las necesidades de este grupo poblacional, para un normal desarrollo y el cumplimiento al derecho humano a la alimentación, son para las organizaciones una medida primordial que trasciende en el contexto de la pandemia por COVID-19, que mantiene a la población en otro tipos de nuevas rutinas.
La campaña dará información para que los niños y niñas superen problemas de una malnutrición que se enmarcan en las deficiencias de micronutrientes, el sobrepeso y la obesidad, que están presentes en las prácticas alimentarias en el país.
La campaña se implementará en las redes sociales de Facebook, Twitter e Instagram de Save the Children y UNICEF, desde donde se brindará diversas recomendaciones sobre aspectos de la alimentación como: lactancia materna, nutrición saludable en la niñez, nutrición afectiva y convivencia familiar.
Así como, el lavado de manos, la desinfección de frutas, verduras y otros alimentos; desde ambas organizaciones esperan que la campaña educativa impacte y las familias terminen adoptando estos hábitos saludables de alimentación y se fortalezcan las prácticas de higiene y consumo de agua segura.
Como la práctica de la Lactancia Materna, que debe ser exclusiva en los primeros seis meses de los recién nacidos, la que puede extenderse hasta los dos años de edad, que vaya apegada a una nutrición afectiva y convivencia familiar.
