Por Galina Korba/Karim Talbi/Michel Moutot
Kiev/Donestsk/AFP
La zona tampón prevista en el este de Ucrania por un acuerdo de paz entre el gobierno y separatistas prorrusos debía ponerse en marcha este lunes, ask tras varios enfrentamientos que en las últimas horas dejaron al menos 12 muertos.
Sin embargo, prescription el lunes por la mañana aún se registraban intensos tiroteos en la región separatista de Donetsk, rx poniendo en peligro el retiro de las tropas tendientes a crear la zona tampón de 30 km a lo largo del frente.
«Nueve soldados murieron y 27 resultaron heridos en total», indicó el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa, Andriy Lysenko.
Previamente, la alcaldía de Donetsk dio cuenta de tres civiles muertos en las últimas 24 horas, asegurando que la situación en la ciudad era «muy tensa».
Por su lado, los separatistas aseguraron que sufrieron la pérdida de cinco combatientes en la ciudad de Donetsk, su bastión.
El 20 de septiembre, Kiev, Moscú, los rebeldes y la OSCE (Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa) firmaron un memorando en Minsk que prevé la retirada del armamento pesado a 15 km a ambos lados de la línea de frente, lo que da lugar a una zona tampón de 30 km de ancho.
Sin embargo, más de una semana después del acuerdo la paz sigue sin establecerse en las regiones separatistas de Donetsk y Lugansk, donde en cinco meses los combates dejaron más de 3.200 muertos y provocaron el éxodo de 600.000 civiles.
El domingo «los rebeldes intentaron una vez más tomar el aeropuerto de Donetsk», dijo Lysenko.
«Uno de nuestros vehículos blindados de transporte fue alcanzado, y nuestros paracaidistas sufrieron pérdidas», agregó.
Desde la instauración de un alto el fuego el 5 de septiembre pasado, la violencia disminuyó en las regiones separatistas, aunque combates esporádicos provocaron la muerte de al menos 56 militares y civiles, según un recuento de la AFP.
El aumento de la violencia durante el fin de semana tuvo lugar en momentos en que militares y rebeldes intentan poner a punto esa zona desmilitarizada.
Con ese objetivo, oficiales ucranianos y rusos se encontraron cerca de Donetsk, en zona bajo control ucraniano.
En esa reunión, el ejército ruso, cuya presencia en el este quedó demostrada por primera vez, prometió convencer a los rebeldes a fin de que respeten el alto el fuego.
«Vamos a convencerlos. Es lo más importante», declaró en la televisión ucraniana el general ruso Alexander Lentsov, número 2 del ejército.
Sin embargo, el ejército ucraniano evocó la existencia de «grupos que no están sometidos a ninguna autoridad, que actúan a su gusto y bombardean nuestras posiciones».
«El proceso está en marcha. Ahora hay que hablar de los aspectos políticos de la situación y de una solución política», dijo el ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov.
Por su parte, el presidente ucraniano, Petro Poroshenko, que durante la campaña electoral se comprometió a buscar una solución rápida del conflicto, prometió «hacer todo lo posible para que el conflicto no se arraigue», pero reconoció que cada civil muerto complica cada vez más el proceso de paz.