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Se necesitan políticas para el empleo y productividad

SINDICATO DE MÉDICOS TRABAJADORES DEL INSTITUTO SALVADOREÑO
DEL SEGURO SOCIAL (SIMETRISSS)

El trabajo decente resume las aspiraciones de la gente durante su vida laboral. Significa contar con oportunidades de un trabajo que sea productivo y que produzca un ingreso digno, cialis seguridad en el lugar de trabajo y protección social para las familias, nurse mejores perspectivas de desarrollo personal e integración a la sociedad, libertad para que la gente exprese sus opiniones, organización y participación en las decisiones que afectan sus vidas, e igualdad de oportunidad y trato para todas las mujeres y hombres.

Definición a cargo de la Organización Internacional del Trabajo (OIT)

De acuerdo al informe Tendencias Mundiales del Empleo 2014 de la OIT. Los mercados de trabajo a nivel mundial siguen estancados a pesar de la lenta recuperación de la economía global. El informe exhorta a un cambio urgente hacia políticas más favorables para generar empleo en los diferentes estratos sociales.

Observando un poco los números, el desempleo alcanzó los 202 millones a nivel global en 2013, sin embargo la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) a través de un rotativo, mostró datos la semana pasada, donde refleja los avances que  El Salvador ha tenido en la lucha contra el desempleo. Destacando que la tasa de 2009 fue de 7.1%; de 6.8% en 2010; 6.6% en 2011, y 6.2% en 2012.

Sin embargo existen algunos escoyos a superar; economistas y analistas aseguran que la pobreza ha incrementado, debido a que ascendió el número de personas desempleadas, respecto a la población económicamente activa, siendo los jóvenes los más afectados al momento de incursionar en el mercado laboral.

En la actualidad, unos 74,5 millones de hombres y mujeres menores de 24 años están desempleados, una tasa mundial de desempleo juvenil superior a 13 por ciento. Trasladado a nuestro país, basados en datos de la Dirección General de Estadísticas y Censos (Digestyc), indican que los salvadoreños de entre 16 y 29 años tienen una tasa de desempleo que asciende al 10.7 por ciento, siendo superior a la tasa de todo el país. Estos son datos desalentadores, pero son una base sólida para cambiar estrategias  y paulatinamente transformar la realidad. De  la cual algunos candidatos se han aprovechado para hacer proselitismo político sin mostrar propuestas concretas y efectivas.

De esta manera, como sindicato nos vemos obligados a exigirles a las diferentes fuerzas políticas del país que se haga  un replanteamiento de las políticas para disminuir de manera substancial la inseguridad de los mercados laborales.

Pero se pueden preguntar cómo ha sucedido la incertidumbre laboral, traducido en el día a día…

Los hogares con miembros sin empleo, deudas o con salarios estancados, no han consumido lo suficiente, dificultando el aumento de la capacidad productiva de las empresas debido a la inestabilidad de éstas sobre la generación de nueva demanda para sus productos. Ese esquema ha limitado los ingresos del gobierno, lo que se traduce en menos inversión para fomentar la recuperación de los mercados laborales.

Según la OIT la consolidación fiscal puede ser contraproducente, y dificultar la reducción del déficit presupuestario.

Sin embargo, cabe que la formulación de políticas bien coordinadas para fomentar el trabajo puede reducir la deuda pública actual, siendo  necesario intensificar el gasto gubernamental para crear empleo y aumentar la productividad. Algunas de las alternativas de inversión pueden ser  el facilitar a los trabajadores su búsqueda de empleo,  no solo en el sector informal o fuera de su área y  las inversiones en formación vocacional o programas empresariales, constituyen medidas necesarias e importantes para mejorar la cualificación de los trabajadores.

No olvidemos que el salvadoreño siempre se ha distinguido por ser “chambeador”, tener fe y seguir adelante, por eso necesitamos velar por el  trabajo decente, para que nuestros hermanos sean garantes de productividad y puedan llevar alegría, estabilidad a sus hogares, porque solo así nuestro país crece. Eso queremos lograr en el próximo quinquenio y sabemos que nada es imposible con transparencia y ganas de servir al pueblo.

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