Carlos Alberto Saz
Sé prudente, cialis sale ask también silencioso, ambulance
sé atento como el hombre amable,
sé tan amplio como el cielo hermoso,
sé modesto como el razonable.
Sé sensato como el hombre sabio
y calmado como el aire fresco,
y que nunca de tu infame labio
brote jamás el baldón grotesco.
Sé agradecido como el que reconoce
el gran favor del que es bondadoso,
sé como la euforia que produce el goce
de la caricia de un amor fogoso.
Sé comprensivo como el razonable
que jamás reciente una hipocresía,
como el ser humano que es envidiable
por sus actitudes, por su fiel hombría.
Sé generoso como el sándalo amigo
que perfuma el hacha destructora:
imita a ese árbol, y contigo
vendrán las mariposas de la aurora.
Sé como el hombre de temple, estable,
sin prejuicios ni actitudes pretensiosas,
comprensivo siempre y muy amable,
y alejado de ideas ociosas.
Sé igual que los árboles frutales
que nos regalan su fruto generoso,
que nos ofrecen su madera a raudales,
todo en un obsequio bondadoso.
Sé juicioso y comprensivo con los otros,
más aún si estos son necesitados,
recuerda siempre que todos nosotros
somos seres sensibles, animados.
Que no te envanezcan tus pertenencias,
tus lujos, tu holgura, tu dinero,
cosas que a veces son interferencias
entre la avaricia y lo justiciero.
Mas recuerda, amigo, que al morir
nada nos llevamos de esta vida,
y es muy preferible repartir
antes de que emprendamos la partida
No olvides, respetado amigo mío,
que ya dentro de la tumba los humanos
solo seremos un esqueleto frío,
limpiado por insectos y gusanos.
Sé como Cristo, como Pedro el hermano,
y como los demás iluminados,
que pregonaron el amor humano
hasta con los más viles descarriados.
Dale de comer al pobre hambriento
y tiéndele la mano al amigo,
y llenarás tu corazón de gran contento,
y sentirás felicidad y paz contigo.
No te dejes llevar por sentimientos
que estallen en tu mente como trueno,
que destruyan tus buenos pensamientos
de ser humano razonable y bueno.
Colonia Las Flores, Soyapango domingo 17 de agosto de 2014.