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@RosmeriAlfaro
La propuesta presentada por la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP), ask representa una burla para el trabajador, discount ya que este sector no toma en cuenta que el costo real de la canasta básica alimentaria en el país, no permite garantizar al pueblo salvadoreño y nuestros productores dedicados al trabajo agropecuario la satisfacción de las necesidades mínimas de subsistencia para sus familias como: la alimentación, salud y educación, dijeron miembros de PECOSOL , ante la propuesta de la ANEP, que propone un incremento del 3% al salario mínimo.
Ante la falta de consenso por lograr un acuerdo al aumento del salario mínimo en el país, la Plataforma Centroamericana de Economía Solidaria Capítulo El Salvador (PECOSOL), conformada por organizaciones sociales, sector agropecuario, ambientalistas y defensores de los derechos humanos, solicitaron a la Asamblea Legislativa y miembros del Consejo Nacional del Salario mínimo (CNASM), ponerse de acuerdo y realizar a la mayor brevedad una revisión oportuna a la propuesta presentada por el Gobierno, para que este sea anual y no por períodos como lo establecido por la ANEP.
Además, propusieron un aumento al salario de acuerdo a la canasta básica alimentaria salvadoreña y un solo salario mínimo de 300 dólares, considerando que no debe continuar manejándose un costo de la canasta básica diferenciado entre los sectores urbanos y rurales, sino hacer prevalecer el principio de igualdad como está establecido en la constitución.
“Es urgente que el salario mínimo sea adecuado al costo real de la canasta básica alimentario de las y los trabajadores de este país, y no responda a los intereses de la empresa privada, quienes solo ven la oportunidad de hacer crecer sus ganancias en detrimento de la calidad de vida de las y los trabajadores”, expresó Tania Tovar, miembro de PECOSOL.
PECOSOL demanda que tanto el Gobierno como la empresa privada se pongan de acuerdo y permitan que el aumento al salario mínimo contribuya a generar en las familias salvadoreñas, condiciones económicas justas y dignas, y en igualdad de condiciones.
Asimismo, solicitan que para establecer el salario mínimo se consideren los gastos ordinarios generados en: alimentación, vestuario, educación, protección a la salud y transporte de una familia obrera promedio en el sector urbano o rural, argumentando que el salario mínimo de las y los trabajadores rurales es extremadamente diferenciado y precario.
