Redacción Nacionales
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La I Cumbre Iberoamericana de Procuradores, Defensores y Comisionados de Derechos Humanos dio inicio este lunes, con la presencia de las delegaciones de 17 países. Catalogada como un evento histórico, para el país, en la Cumbre se abordarán temas coyunturales como el manejo de la pandemia y de la seguridad.
Entre los invitados está el Ministro de Salud Pública Francisco Alabí , y el Ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro, para que compartan directamente desde su experiencia sobre estos temas.
El Procurador de Derechos Humanos de El Salvador, Apolonio Tobar, manifestó que los derechos humanos de toda persona sigue siendo un reto, principalmente, cuando el mundo enfrenta una pandemia que desafía a todos los sistemas de protección del mundo, en aspectos de estigma y discriminación.
Además, sostiene que es necesario que estrategias y medidas gubernamentales desplegadas para casos como la pandemia, tengan enfoque de Derechos Humanos, razonabilidad y proporcionalidad para que no haya afectaciones más allá de lo que las circunstancias imponen.
“Creemos firmemente que la gobernabilidad efectiva es posible, si pretendemos y concluimos que Estado somos todos y, por lo tanto, estamos obligados a promover la satisfacción de la población en general”, declara el Procurador, quien agrega que la PDDH debe también dialogar.
Para Tobar, esta Cumbre debe permitir comprender que, como país, deben cumplirse los objetivos de la agenda 2030, sin dejar a nadie atrás. Y “que la primera tarea a cumplir es que todos/as debemos tratarnos con dignidad y respeto”.
Y recalcó que cuando haya afectaciones en la población lo van a decir, “lo que está mal lo tenemos que decir, pero no tenemos que ser irresponsables, sino que tenemos que tener los suficientes argumentos probatorios”, dijo.
Por lo tanto “las investigaciones de las autoridades deben de ser objetivas y permitir identificar con claridad si una persona pertenece a pandillas para que no haya afectaciones a personas inocentes. Al referirse a las capturas durante el Régimen de Excepción.
Por lo que afirmó que las resoluciones de la PDDH en este sentido, contemplan recomendaciones a la PNC a Centros Penales y a la Fuerza Armada para que haya trato digno hacia los privados de libertad.
Prueba de esto es que desde el inicio del régimen de excepción, la PDDH ha recibido 3 mil 400 denuncias, y hay un poco de atraso, pero se está trabajando para atenderlas.
Y agregó que “Desde la PDDH le hemos dado un giro importante en cuanto a la independencia que debe tener la institución. Hemos logrado un reposicionamiento a nivel internacional de una manera muy positiva”.
Guillermo Escobar Roca, Director del Programa Regional de Apoyo a las Defensorías de Iberoamérica, de la Universidad de Alcalá – Henares, dijo que sin un sistema democrático fuerte, un Estado de derecho serio, una justicia social mínima, por más que avancemos en técnicas de garantía e instituciones destinadas a garantizar los DDHH, los pasos adelante serán cortitos y destinados a retroceder.