Kingston/Jamaica/AFP
El grupo C de la Copa Oro inicia con los duelos entre El Salvador frente a Curazao y el local Jamaica ante Honduras, en duelos marcados por la velocidad de los caribeños y la destreza técnica de los centroamericanos.
Los encuentros se disputarán en el estadio Independence Park, de Kingston, primera ciudad caribeña que acoge la Copa Oro, cuyas tradicionales sedes han sido en Estados Unidos, México y Canadá.
La azul y blanco, conducida por el mexicano Carlos de Los Cobos, intentará progresar en el torneo con una nueva camada de jugadores, formada después de que en 2013 el país suspendió de por vida a los miembros de la selección mayor por el amaño de partidos.
En tanto, con 18 de sus jugadores militando en Europa, la selección de Curazao espera hacer un buen papel en el certamen regional.
Bajo la conducción de Remko Bicentini, Curazao tiene el potencial de sus veteranos que militan en Inglaterra, como Cuco Martina (Everton), y Leandro Bacuna (Cardiff City), y la destreza que muchos de sus jugadores ha adquirido en el fútbol de Holanda.
Mientras tanto, Honduras, dirigida por el uruguayo Fabián Coito, quiere levantar su imagen luego del 7-0 que sufrió ante Brasil en su último fogueo de hace una semana. Los catrachos son históricamente considerados una de las potencias de CONCACAF, junto con México, Estados Unidos y Costa Rica, y ha estado presente en tres Mundiales: España-1982, Sudáfrica-2010 y Brasil-2014.
En las ediciones de 2009, 2011 y 2013, los hondureños han figurado en los primeros cuatro puestos de la Copa Oro.
La selección de Jamaica, de la mano de Theodore Whitmore, dispone de jugadores que militan en el extranjero, como el joven Leon Bailey, que destaca en el Bayer Leverkusen de Alemania.
Los Reggae Boyz cuentan además con futbolistas que se destacan en la MLS de Estados Unidos, como el portero del Philadelfia Unión, Andre Blake, y el zaguero Alvas Powell, del Cincinnati.
Jamaica, que estuvo en Francia 1998, llega alentada por su reciente triunfo amistoso 1-0 ante Estados Unidos. Además, producto de su avance futbolístico, estuvo en las últimas dos finales de la Copa Oro.