SINDICATO DE MÉDICOS TRABAJADORES
DEL INSTITUTO SALVADOREÑO DEL SEGURO SOCIAL (SIMETRISSS)
Hace unos años cuando entré a trabajar a la institución, ed conocí sobre SIMETRISSS y pude darme cuenta por las historias relatadas por diferentes colegas, buy cialis los estragos que el actuar de unos cuantos dejaron en el sindicato. Y para ese tiempo le fui perdiendo fe al sindicalismo, es más, llegué a decir “ de esa agua no beberé” pero como bien es sabido “el que escupe para arriba…”.
En esos tiempos veía como se cometían atropellos en la institución y otros sindicatos solo bajaban la cabeza y con descaro defendían más los intereses políticos que los mismos derechos de sus trabajadores afiliados. Con tantas historias y escenas de terror sentía aversión por el sindicalismo. Hasta que un día me llego el rumor que SIMETRISSS vivía otra etapa. No muy convencida me fui acercando y tuve la oportunidad de conocer médicos y médicas luchando por un fin gremial, no defendiendo colores políticos, no sirviéndole a gobernantes, luchando por el color blanco de nuestras gabachas y por los intereses de sus afiliados. Fue ahí donde pude completar el dicho “ el que escupe para arriba en la cara le cae”, me anime y sí lectores, me metí hasta el fondo.
Y ¿el por qué de esta catarsis? Porque nada menos la semana pasada leí el escrito de un ex-sindicalista, hoy un personaje patronal, hablando sobre su recorrido en el sindicalismo y como se inmoló por defender las causas de la época y todo lo que se alcanzó. En su momento fue bueno, no voy a restarle importancia a ello. En lo que si difiero es en lo que vino después y en el hoy.
Muchos fueron los que se unieron y lucharon ese 2001, los que no tuvieron un pan para sus hijos ese diciembre, que perdieron desde su casa hasta su familia, y fueron todos ellos los que se sintieron traicionados y utilizados. No me dejan mentir la cantidad de desafiliaciones que sufrió nuestro sindicato de médicos posterior a ello. Y leyendo las palabras de este personaje me pregunto cómo puede decir que ya no es necesario acciones de hecho para ser escuchados cuando él tiene más de cinco años de haberle dado la espalda a su gremio y el gremio estar realizando acciones de hecho para poder lograr una parte de las promesas políticas del partido en el poder y lo que hasta hoy quedo en eso, otra promesa más. Primero diciendo que no estaba en sus manos y ¿ahora?
Se ha tratado por todos los medios de darle continuidad a una mesa de negociación y lo único que ha hecho es darle largas y cerrarnos las puertas buscando como ya es costumbre excusa y media. Quizá antes dolía menos este tipo de actitudes pero que las protagonice hoy un ex sindicalista y que aparte de eso sea capaz de mentir sobre sus acciones, indigna. Me permito en estas líneas recordarle a este señor que aquel que es sindicalista de corazón, no se permite olvidar sus ideales. No sé que molesta más, si lo poco que han hecho ahora que pueden o las mentiras que son capaces de lucubrar…
No estoy en contra de poder superarse en todos los aspectos de la vida, pero si no tolero a aquellos que atropellan a unos y luego les da amnesia. Admirables son aquellos, y cabe mencionar que aquí en nuestro país escasean si no es que ya se extinguieron o nunca han existido, aquellos que no se permiten ser serviles a un fin político, sino son fieles a aquellas raíces donde pertenecen.
Sí señor, se logro detener la privatización de la salud, en efecto si por la tenacidad de miles de trabajadores de la salud. Nueve meses que para muchos trabajadores incluyendo galenos de la institución es una herida que aún no cicatriza. Son más de trece años de un salario estancado para cada uno de los que laboramos en la autónoma, y más triste aún, que alguien al frente de la dirección solo recuerde las marchas multitudinarias tal como lo dice, pero hasta ahí, no le quedaron más que recuerdos porque las ganas de cambiar las cosas no se si se le perdieron o es que jamás las tuvo…
Y es que después se leer la nota de este personaje, no pude evitar preguntarme, ¿Se está haciendo lo necesario por cambiar y mejorar la institución? ¿Se le brinda por medio de medidas efectivas un servicio de calidad al derechohabiente? ¿Se le reconoce al trabajador de la institución su tenacidad en las luchas por mantener la salud para todos? ¿O simplemente se han enmascarado los problemas?
Citas prolongadas, falta de medicamentos, fuga de médicos… Así podría hacer una extensa lista de problemas existentes por años y presentes hasta el día de hoy.
No señores, no es válido decir que no es problema de la actual administración, sino problema de años. Cuando se le conocen a los problemas las entrañas no es aceptable no resolverlos.
¿Ex sindicalista y obstaculizando negociaciones? ¿Ex sindicalista y hoy dándole la espalda a su gremio? ¿Ex sindicalista y hoy más político que médico? Un verdadero ex sindicalista de corazón es aquel que cuando las circunstancias lo ponen del otro lado de la cerca JAMÁS olvida los principios de sus luchas pasadas…