Buenos Aires/PL
Representantes de más de 60 organizaciones se reunirán el jueves para definir detalles de una movilización nacional en agosto contra los despidos, los tarifazos y la política de ajuste económico del gobierno de Mauricio Macri.
La Marcha Federal comienza a tomar forma, recordó el portal informativo MinutoUno en alusión a la masiva movilización que hace 22 años desde todos los puntos del país confluyó en Plaza de Mayo para rechazar las políticas del gobierno de Carlos Menem.
Convocadas por la Central de Trabajadores de Argentina (CTA de los Trabajadores), más de 60 organizaciones se reunirán el próximo jueves en su sede para avanzar en los preparativos.
La idea original era convocarla para el 17 de agosto, aniversario de la muerte del prócer General San Martín, pero se decidió postergarla para esperar al congreso de las fracciones de la Confederación General de Trabajadores (CGT) prevista el 22 de agosto con la esperanza de sumar a esas centrales.
Ese día dirigentes de las tres secciones en que está dividida la CGT se reunirán para reunificar esa federación bajo el liderazgo, según se anticipa, de un triunvirato.
Pablo Micheli, líder de la CTA Autónoma, dijo al diario Página 12, que «vamos a acompañar la Marcha Federal pero hasta el momento no estamos participando de la organización».
La idea es que partan cuatro columnas de distintos puntos del país para convergir en Plaza de Mayo.
Después de tres días de marcha las columnas sureñas confluirían en la localidad bonaerense de Avellaneda y las provenientes del norte en La Matanza. A las dos de la tarde del «Día D» -por definir- en encaminarían todas con rumbo a Plaza de Mayo, donde tendrá lugar el acto central.
Las consignas están también por precisar, pero versarán sobre los rechazos al tarifazo, a los despidos, a la criminalización de la protesta social, a la destrucción de todas las políticas sociales y a la apertura indiscriminada de importaciones.
También para exigir políticas favorables a las pequeñas y medianas empresas, de incentivo al mercado interno y de la reapertura de las paritarias para que los salarios no sigan perdiendo poder adquisitivo.