Por John Davison
Majdal Shams/AFP
Siria acusó este miércoles a Israel de «amenazar» la seguridad en Oriente Medio por bombardear posiciones sirias en los Altos del Golán, for sale en respuesta a un atentado contra soldados israelíes, sovaldi lo que podría desencadenar un conflicto entre ambos países tras décadas de calma.
El ataque aéreo israelí la madrugada del miércoles dejó un fallecido y siete personas más heridas, según las fuerzas armadas sirias.
«Advertimos [a Israel] contra los intentos desesperados incitando a la escalada de tensión. La repetición de estos actos agresivos amenaza la seguridad de la región», indicó el ejército sirio en un comunicado.
Israel bombardeó la madrugada del miércoles posiciones del ejército sirio en respuesta a un atentado con bomba, que hirió a cuatro soldados israelíes cuando patrullaban en la línea de demarcación entre Siria e Israel en los Altos del Golán.
«Atacamos a quien nos ataca», dijo el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, durante el Consejo de Ministros. «Se trata de elementos sirios que no solo permitieron, sino que también cooperaron en los ataques contra nuestras fuerzas», añadió.
Netanyahu indicó también que Israel continuaría prohibiendo «el traslado de armas por aire, mar y tierra», en referencia a los equipos militares destinados al movimiento chiita libanés, Hezbolá, que combate en Siria junto a las fuerzas del presidente sirio, Bashar al Asad.
Periodistas de la AFP vieron el miércoles a mediodía tres carros de combate israelíes apostados cerca de la frontera de demarcación entre ambos territorios, cerca de Majdal Shams, capital de las localidades drusas del Golán.
El ministro israelí de Defensa, Moshé Yaalon, había atribuido poco antes al régimen de Bashar al Asad «todo lo que ocurre» en su territorio.
«Si continúa cooperando con elementos terroristas que quieren dañar a Israel, le haremos pagar un precio muy alto», dijo Yaalon.
El bombardeo israelí se produjo «contra varias posiciones militares sirias, que sirvieron para realizar el ataque contra el personal militar ayer», dijo el ejército de Israel en un comunicado.
El atentado con bomba, producido en la parte ocupada desde 1967 por el Estado hebreo en la meseta del Golán, dejó cuatro soldados heridos, uno de ellos de gravedad.
Este ataque aéreo es el episodio más violento desde la guerra de 1973 en las inmediaciones de la línea de demarcación entre la parte siria e israelí de los Altos del Golán.
Algunas zonas del lado sirio de esta región están controladas por los rebeldes que luchan contra las fuerzas de Bashar al Asad, entre ellos grupos yihadistas hostiles a Israel.
Según el Estado hebreo, Hezbolá, aliado de Asad y enemigo de Israel, también está presente en el lado sirio del Golán.
Israel replicará «cuando y donde sea»
«No toleraremos ningún atentado contra nuestra soberanía, nuestros soldados o nuestros ciudadanos. Responderemos con determinación y con fuerza (…) cuando y donde sea, como hicimos esta noche», añadió Yaalon.
El ejército sirio consideró que el ataque israelí busca «desviar la atención de las sucesivas victorias» de las fuerzas de Bashar al Asad en la guerra Siria, que este mes entró en su cuarto año.
Al igual que numerosos analistas de seguridad israelíes, el general Amos Yadlin estima que el régimen sirio podría estar detrás del ataque del martes contra un jeep militar israelí.
«El ataque de ayer era profesional. No hay lugar a dudas de que los sirios estaban informados y, puede ser, que lo llevaran a cabo en nombre de Hezbolá», indicó Yadlin en una entrevista con la radio militar.
Se trata del tercer incidente en las últimas dos semanas en la frontera septentrional de Israel. Los oficiales israelíes culpan al ejército sirio de complicidad en estos ataques.
Los dos ataques anteriores, el 5 y el 14 de marzo, los atribuyeron a Hezbolá, el movimiento chiita libanés que libró una sangrienta guerra contra Israel en 2006.
En esta ocasión, Israel no apuntó directamente a Hezbolá, si bien Netanyahu indicó el martes que el número de «yihadistas y de elementos de Hezbolá» aumenta en la parte siria de los Altos del Golán.
Aunque por ahora nadie reivindicó el atentado del martes, los analistas señalan similitudes con el cometido la semana pasada contra tropas israelíes en la frontera con Líbano, atribuido al Hezbolá.
Israel ocupó la estratégica meseta del Golán en la Guerra de los Seis Días, de 1967, y la anexó en 1981, sin ningún reconocimiento de la comunidad internacional.
Siria e Israel continúan oficialmente en guerra. No obstante, la línea de demarcación en los Altos del Golán está considerada como una frontera tranquila desde el final de la guerra de Yom Kipur en 1973.