Gloria Silvia Orellana
@SilviaCoLatino
El entusiasmo y alegría de las usulutecas, Flor Haydee Funes de Escobar y Mónica Alexandra Romero de Hernández era evidente, las dos viajarán en los próximos días a la Feria de Levante en Italia, para presentar sus productos de añil y café saborizado.
“Comencé trabajando en un taller en Suchitoto (Cuscatlán) ahí se trabajaba el añil, pero yo era costurera, pero siempre me gustó esa técnica, pero no sabía hacer nada, así que adquirí los conocimientos y gracias a Dios, recibí toda la asesoría necesaria para comenzar el proyecto del emprendimiento… solo necesitábamos que confiaran en nosotras”, narró.
En reconocimiento a su desempeño como empresarias integrales y acreedoras de toda la confianza en el manejo de sus créditos e inversiones en sus proyectos productivos y empresariales, la Agencia Italiana de Cooperación; BANDESAL, ONU –MUJERES y la Secretaría de Inclusión Social a través, de “Ciudad Mujer” rindieron un reconocimiento a las usuarias que aplicaron sus conocimientos técnicos y teóricos para transformar sus vidas.
La actividad se enmarcó en el Primer Aniversario del proyecto “Fondo Mujer”, que entregó 127 mil 875 dólares en créditos productivos, que estimularon a emprendedoras y fortaleció a empresarias, que ha sido considerado por BANDESAL y las organizaciones internacional que apoyan la iniciativa, como un éxito, porque en su cartera crediticia no reporta mora.
“Mi negocio se llama –Flor de Añil- y he ido desarrollándome poco a poco, cuando vine a Ciudad Mujer Usulután, tenía dos años trabajando pero estaba estancada, no podía desarrollarme porque no tenía capital.
Mi vida cambió en el 2015, asistí a un curso de negocios y ahí me abrieron la visión de que podía hacer algo más grande y es así como avancé”, comentó de Escobar.
“Hoy puedo decir que apoyar el proyecto de Fondo Mujer por la Agencia Italiana de Cooperación fue muy acertado y nos enorgullece, por el talento de todas ustedes”, reafirmó Cesare Colombo, experto en Cooperación.
Colombo indicó que la creatividad y perseverancia en los emprendimientos de las mujeres empresarias comprueba la capacidad de desarrollo de nuevas ideas y como tal, la transformación de la sociedad salvadoreña.
“Estos proyectos han transformado no solo a ustedes, sino a la comunidad y abren un camino de desarrollo y por lo tanto, el crecimiento de todos a través del proyecto de Fondo Mujer, siendo libertadoras locales porque tienen el conocimiento empírico para innovar a través de proyectos económicos estratégicos de país y la región. Por eso estamos seguros que con sus empresas van a seguir alcanzando sus sueños, que es donde queremos apoyarlas”, reiteró.
Mientras, Ana Elena Badilla, de ONU MUJERES, dio un reconocimiento al programa “Fondo Mujer”, a las instituciones que lo integran y en especial a las mujeres emprendedoras que decidieron tomar el reto de cambiar sus vidas, al convertirse en personas económicamente independientes.
“Estas mujeres de La Paz, La Unión, San Miguel, Usulután y Morazán, para celebrar el primer aniversario de “Fondo Mujer”, que es un proyecto novedoso que ha posibilitado la mejora de vida de muchas mujeres. Las felicito a ustedes, porque el camino que han tenido que recorrer por sus negocios no ha sido fácil, han tenido que enfrentar muchos sacrificios, así como vencer temores y miedos para arriesgarse en sus negocios. Y ahora están acá como mujeres vencedoras”, manifestó.
Asimismo, les reiteró que son mujeres empresarias que cuentan con autonomía económica y que pueden tomar sus propias decisiones para innovar o extenderse hacia otros mercados, donde las instó a seguir trabajando.
“En ONU Mujeres reconocemos su trabajo y siempre decimos que las mujeres lo que necesitamos es oportunidades, de ahí en adelante nosotras sabemos qué hacer con nuestros emprendimientos. Este ha sido un proyecto exitoso que sus préstamos han sido honrados en su tiempo, eso es un signo de que podemos trabajar bajo esta modalidad y permitir que más mujeres participen para desarrollarse”, indicó.
La presidenta de BANDESAL Mélida Mancía explicó que el proyecto “Fondo Mujer” fue posible por el trabajo coordinado de estas instituciones y el esfuerzo continuado de las mujeres que decidieron retomar el reto de transformar sus vidas y familias.
“Ustedes son la imagen del empeño y del buen uso de los créditos, que se ha traducido en oportunidades para que más mujeres microempresarias puedan obtener acceso a los fondos. Ustedes abren oportunidades para otras mujeres y les agradecemos su lealtad y queda comprobado que las mujeres somos mejores administradoras, pero aún debemos de trabajar contra la exclusión social y vulnerabilidad en el acceso a oportunidades de desarrollo”, consideró.
Para Mónica Alexandra Romero su empresa familiar “Delicias de Papá Nan”, comenzó vendiendo café artesanal en ferias de los municipios aledaños, pero la visión de su negocio cambió luego de ingresar a “Ciudad Mujer”, donde tuvo acceso a cursos y preparación técnica, que le permitió mayor oportunidad de darle un nuevo giro para comerciar su producto.
“Delicias de Papá Nan” es una venta de café tostado y procesado artesanalmente que se vende en su presentación pura o saborizado con panela, chocolate, así como la producción de harinas, semillas y jaleas.
“Ciudad Mujer me ha ayudado muchísimo, así también CONAMYPE que nos llevaron paso a paso hasta que formalizamos la empresa, empezamos a perfeccionar productos y gracias a Dios hemos salido adelante, aquí en Ciudad Mujer nos enseñaron a empoderarnos de nuestros conocimientos, a desafiar nuestro futuro con la empresa, así como el manejo adecuado de los créditos y eso nos da seguridad”, expresó.
La secretaria de Inclusión Social Vanda Pignato agradeció a los cooperantes internacionales y usuarias de “Ciudad Mujer”, por sus aportes y las iniciativas que nacieron de estos emprendimientos de mujeres que nunca habían tenido la oportunidad de contar con acceso financiero.
“La Cooperación Italiana ha tenido una gran paciencia con nosotras, y Naciones Unidas por no abandonarnos nunca. En los debates que hemos tenido coincidimos que unos de los principales desafíos es lograr la autonomía económica y el empoderamiento total de las mujeres. Y entre esos obstáculos el más importante a superar el acceso a fondos financieros, ya que la banca comercial en ningún momentos les daría un crédito ya sea, por su edad o por su domicilio, le hemos demostrado que las mujeres somos el motor de la economía”, puntualizó.