Rebeca Pineda
Lissette Santamaría
Desde hace 15 meses, en el municipio de Francisco Morazán, departamento de Chalatenango, Pedrito (como lo llamaremos) se levanta a las 3:00 de la madrugada para dirigirse junto con su madre hacia San Salvador, a la “Fundación Ayúdame a Vivir“ y recibir su tratamiento contra la leucemia.
El viaje que dura más de tres horas, lo realiza tres o cuatro veces por semana, después de que fue le dijeron que tenía leucemia (cáncer de la sangre que comienza en la médula ósea).
Pedrito llegó al evento para sobrevivientes de niños con cáncer este miércoles, donde compartió su experiencia: “es una situación complicada y dolorosa, sin embargo uno aprende a valorar la vida, ser optimista, y a ver el mundo de forma muy diferente” dijo.
Para él fue duro estar alejado de su casa, estar encerrado en cuatro paredes todo el tiempo, pero su enfermedad es otra oportunidad de vida, para ser positivo, perseverante en todo el tratamiento y ahora quiere cumplir sus sueños y ser un mecánico porque le gustan los carros.
Rina Hernández, madre de Pedrito, contó como su mundo se caía, tras confirmar el diagnóstico.
El tratamiento incluye pastillas, inyecciones, quimioterapias entre otros, que han dado resultado, pero que le generaron una trombosis.
Los cuidados médicos, la efectiva detección y una atención integral que ofrece la Fundación Ayúdame a Vivir (constituía en 1992), Pedrito logró recuperarse de la leucemia y de la trombosis y se le brindó la oportunidad de tener una mejor calidad de vida y abrazar nuevas oportunidades.
Actualmente la fundación atiende a más de 866 niños con cáncer, desde los 0 hasta los 12 años de edad y ofrece atención con una duración de 3 años de tratamiento, más 5 años de monitoreo de la enfermedad.
Labor de amor y bondad
Por décimo año consecutivo, la empresa Pollo Campero, se ha unido al esfuerzo, esta vez con la entrega oficial de $407,570 a la Fundación Ayúdame a Vivir resultado de la megarifa “Únete para Salvar Niños con Cáncer 2018-2019”. Los clientes contribuyeron para recaudar mediante la compra de tickets con el valor de un dólar depositados en buzones ubicados en los 70 restaurantes del país.
“Estamos muy agradecidos con todos los salvadoreños y con Pollo Campero. El donativo lo utilizaremos para medicamentos del centro médico y la unidad de niños con cáncer que tenemos dentro del Hospital Bloom, así como para el trabajo de apoyo social, psicológico y educativo de los niños” dijo Leonor de Llach, presidenta de la fundación.
Esta enfermedad anualmente acaba con la vida de 439 mil personas en el mundo, por lo que la fundación pretende garantizar el acceso a un diagnóstico y tratamiento preciso.
Según las estadísticas de la Fundación Ayúdame a Vivir el
cáncer pediátrico es curable en un 70 % es decir, 7 de cada 10 niños son dados de alta si obtienen un tratamiento y administración de
medicamentos adecuados.
Pedrito es un ejemplo de los pequeños superhéroes que se resisten y luchan día a día. “Los superhéroes valientes de los que les hablo son pequeños en estaturas y grandes de corazón y
valentía”, dijo Álvaro Morales, presidente ejecutivo de Pollo Campero.