Gloria Silvia Orellana
@GloriaCoLatino
La capilla del Hospitalito “Divina Providencia” y la Cripta de Catedral Metropolitana, en donde descansan los restos del primer santo de El
Salvador, recibieron visitas, intenciones y oraciones de “romeristas”, que conmemoraron el 102 aniversario de su natalicio, y en las víspera del primer año de su canonización, el 14 de octubre próximo.
“Yo lo recuerdo por su gran corazón y dedicación hacia los pobres”,
recordó María, quien se encontraba ingresada en el Hospital Divina
Providencia, afectada por un cáncer, cuando lo conoció.
“Le gustaba visitar a los enfermos todos los días y se daba a la
oración diaria, para mí, fue un santo en vida”, reseñó en sus
oraciones de la mañana en la capilla en donde ocurrió el magnicidio.
Asimismo, la comunidad de la Cripta de Catedral abrió sus actividades
en la conmomeración del 102 aniversario, con el canto de las mañanitas
y otras interpretaciones con letras referidas a su pastoral y su entrega al Evangelio y los pobres.
“Hay mucha gente que quiere a Monseñor Romero, y que tienden la mano solidaria a las comunidades que buscan el reino de Dios, ahora que es el día de la Virgen de la Asunción y cumpleaños de Monseñor Romero, debemos buscar como desarrollar nuestro papel, para erradicar las expresiones de violencia, aminorar el fenómeno de la migración y buscar la justicia social”.