TeleSUR
La cifra de fallecidos registrados en Turquía y Siria como consecuencia de los fuertes terremotos casi alcanzó este jueves las 20.000 personas, mientras que más de 70.000 resultaron heridas en ambas naciones.
De acuerdo con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, se contabilizaron 16.170 fallecidos y 64.194 heridos, entretanto, el ministerio de Ministerio de Salud sirio reportó más de 3.470 víctimas mortales y más de 6.000 heridos.
La Fundación de Búsqueda y Rescate Akot señaló esta jornada que el número de personas afectadas por el terremoto alcanzó los 10 millones en Turquía cuando reportan 6.444 edificios derrumbados.
A su vez, los equipos de rescate continúan las labores de búsqueda de miles de personas atrapadas bajo los escombros mientras que las frías temperaturas que promedian los -5 ºC y el tiempo transcurrido atentan contra el hallazgo de sobrevivientes.
El ministro de Salud de Siria, Hassan Al-Ghobash, denunció en conferencia de prensa que las sanciones impuestas por Occidente durante más de 10 años obstaculizan la ayuda humanitaria y la respuesta de emergencia.
Al mismo tiempo, el titular destacó que los centros hospitalarios y de salud se encuentran trabajando a su capacidad máxima, entretanto, fueron movilizados los equipos y el personal necesarios a las zonas afectadas.
Por su parte, las Naciones Unidas enviaron esta jornada a la región controlada por los rebeldes Siria un convoy de ayuda que cruzó desde Turquía por el paso de Bab Al Hawa mientras que el canciller árabe, Faisal Mekdad, destacó que las ayudas internacionales deben pasar por Damasco.
A partir de ello, el Ministerio de Salud sirio reiteró su llamado a los estados miembros de la ONU, el Comité Internacional de la Cruz Roja y otras organizaciones internacionales en aras de agilizar la asistencia.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) apuntó que 23 millones de personas se encuentran altamente en riesgo, producto de una severa crisis sanitaria que podría provocar incluso más fallecimientos que los terremotos.