Tomado de Telesur (https://bit.ly/2F4OT3k)
Un hombre abrió fuego contra decenas de personas en una mezquita de Nueva Zelanda, mató a 49 personas y dejó 48 heridos. El acto terrorista fue perpetrado por un inmigrante australiano blanco quien transmitió en redes sociales.
La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinta Arden, confirmó que al menos 49 personas murieron en una mezquita de la ciudad de Napier, donde un hombre perpetró un tiroteo. Otras 48 personas tienen heridas de las cuales 20 son de gravedad, por lo que el saldo fatal aún puede aumentar. Entre las víctimas fatales hay niños.
El jefe de la policía, Mike Bush, confirmó que el principal responsable es un supremacista blanco identificado con la extrema derecha
La policía del poblado de Christchurch, donde ocurrió el atentado, informó que tiene detenidos a cuatro sospechosos. Uno de ellos está identificado como Brenton Tarrant, de 28 años de edad, quien habría publicado un manifiesto en línea antes del ataque, que él mismo videograbó. Es un hombre blanco de origen australiano quién habría disparado durante 17 minutos a víctimas indefensas.
El terrorista grabó y transmitió en vivo con una cámara portátil sangrientas imágenes a manera de videojuego.
En el video se puede ver la visión subjetiva del tirador. Se observa cómo va circulando por la calle hasta que gira a la derecha y se adentra en un recinto. Después de cruzar parte del estacionamiento, aparece por primera vez en la imagen un fusil.
Para empezar, acaba sin titubear con la vida de las personas que franquean la puerta de entrada al edificio. Acto seguido, y a punto de adentrarse en la mezquita, lanza el fusil al suelo para enarbolar una especie de metralleta que efectúa muchos más disparos en menos tiempo que el arma anterior.
Una vez ya dentro, va disparando a todo aquel que se cruza con él. Las imágenes son de una crudeza indescriptible. Se oyen los disparos que va efectuando y los gritos de las personas que ocupan la mezquita.
Entre las víctimas podría contarse a integrantes del equipo nacional de Criquet de Bangladés que jugarían un partido amistoso este fin de semana contra la selección de Nueva Zelanda.
Al-Sahariar Rokon, testigo del equipo de Bangladés que se encontraba hablando por teléfono con su entrenador, declaró que en principio se encontraba feliz, pero luego, al enterarse de que había víctimas mortales, entró en shock.
Es evidente que estamos viviendo uno de los días más oscuros que ha tenido Nueva Zelanda, dijo en conferencia de prensa la primer ministro. «Los migrantes y los refugiados han elegido hacer de Nueva Zelanda su hogar y es su hogar (…) Para la persona que perpetuó esta violencia no lo es», dijo
«Es simplemente espantoso, algo impensable en Nueva Zelanda», declaró Bill Dalton, acalde de la Ciudad de Napier, donde está el barrio de Christchurch.