Por Julien Girault
Pekín/AFP
El superávit comercial de China creció casi un 50% en 2014, generic buy cialis a un nivel récord, try gracias a unas importaciones en punto muerto y a un aumento mucho más moderado de las exportaciones, en un contexto de ralentización económica.
El gigante asiático, líder mundial del comercio de productos manufacturados, tuvo el año pasado un histórico excedente de 382.460 millones de dólares, según anunciaron este martes las autoridades aduaneras.
Debido a una morosa coyuntura internacional, las exportaciones chinas apenas subieron un 6,1%, a 2,34 billones de dólares, un notable freno respecto al alza del 8% registrada en 2013. Así, uno de los motores del crecimiento chino parece debilitarse.
Pero es sobre todo el estancamiento de las importaciones lo que explica este aumento en el superávit comercial: las importaciones del país apenas crecieron (+0,4%), hasta 1,96 billones de dólares, tras un alza del 7% en 2013.
En total, los intercambios comerciales crecieron el año pasado 3,4%: Pekín esperaba un alza del 7,5%, por lo que se quedó muy lejos del objetivo, y ello por tercer año consecutivo.
«La recuperación económica mundial es lenta, e incapaz de sostener un crecimiento del comercio chino», se lamenta Zhang Yuesheng, portavoz de las aduanas.
Todavía más inquietantes son las estadísticas que «revelan también un debilitamiento de la demanda interior» advertían por su lado Li-Gang Liu y Hao Zhou, expertos del banco ANZ.
La caída de las importaciones, en valor, ha sido alimentada en parte por la caída de los precios de materias primas energéticas, ya que el precio del barril de crudo ha caído un 50% en seis meses.
Ese estancamiento de las compras al exterior se produce en un contexto de mediocres indicadores chinos, como la desaceleración de la actividad manufacturera y de las ventas al detalle, agravados por el marasmo del mercado inmobiliario.
El crecimiento del PIB chino se ha desacelerado a un 7,3% en el tercer trimestre, el mas bajo en cinco años, y podría descender este año a un nivel nunca visto en un cuarto de siglo.
Tras una baja de los tipos de interés del banco central chino (PBOC) en noviembre, la mayoría de los analistas apuesta ahora por nuevas medidas de flexibilización monetaria para estimular a la economía.
Diciembre, menos malo que lo esperado
Sin embargo, las estadísticas comerciales de diciembre se han revelado menos sombrías de lo que auguraban los analistas.
Las exportaciones de China aumentaron en términos anuales un 9,7% el pasado mes, a 227.500 millones de dólares, cuando 40 expertos interrogados por Bloomberg apostaban en promedio por un alza del 6%. Las exportaciones habían progresado en noviembre solamente un 4,7%.
Las importaciones, a su vez, retrocedieron en diciembre en términos anuales un 2,4% a USD 177.900 millones, cuando los analistas esperaban una caída del 6,2%. En noviembre retrocedieron 6,7%.
«Se esperaba que la persistente baja de los precios del crudo y de otras materias primas siguiera reduciendo el valor de las importaciones, pero China ha querido aparentemente aprovechar la situación para incrementar sus reservas estratégicas [de petróleo], lo que ha tenido un efecto de compensación» explicó Julian Evans-Pritchard, analista de Capital Economics.