Por Myrna de Escobar Su mirada expectante evoca sorpresa, es como si preguntara: ¿Qué sucede? Calza un par de botas blancas y antifaz negro. Responde al nombre de Muñeca, mueve su cola negra y da pequeños maullidos al conversar. No es tímida y a diferencia del resto de gatos, ella da la bienvenida a las visitas encorvando su columna para …
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