@DiarioCoLatino
Debido a que en el país se registren lluvias de moderada a fuerte intensidad, tipo temporal, la Dirección General de Protección Civil decretó Alerta Amarilla, por la probabilidad de una onda tropical, que tendrá influencia desde el sábado 30 hasta lunes 1 de junio. Se prevé que este sistema esté acompañado con vientos de moderados a ocasionalmente fuertes, hasta 40 kilómetros por hora y ráfagas ocasionales de hasta 60 kilómetros por hora.
El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) señaló que estas condiciones climáticas se deben a la formación de una baja presión, frente a la costa pacífica de Centroamérica, asociada a la Zona de Convergencia Intertropical (ZCIT), con posibilidades que para finales de la semana se convierta en una depresión tropical; especialmente en la zona costera y la cadena volcánica del país, así como, en aguas profundas. Protección Civil indicó que, considerando la obstrucción de bocanas en la zona costera, la acumulación de basura y ripio en zonas urbanas que es arrastrada por las escorrentías superficiales, y la probabilidad de generarse inundaciones, las comisiones departamentales y municipales deberán prever los medios necesarios para atender posibles emergencias, tal como lo establece el artículo 34 del Reglamento de Funcionamiento de las Comisiones del Sistema Nacional de Protección Civil.
Asimismo, recomendó a la población permanecer atento al incremento de los niveles de ríos y quebradas, mantener vigilancia sobre taludes y paredones, así como el adecuado funcionamiento de drenajes y tuberías, a fin de evitar socavamientos o formación de cárcavas. Las personas que habitan cerca de playas deben permanecer pendientes durante las mareas altas y, de darse inundaciones, evacuar oportunamente, si fuese necesario. Se deberá informar a las comisiones comunales y municipales de Protección Civil, Cuerpo de Bomberos y compañías distribuidoras de energía eléctrica sobre ramas o árboles que puedan obstaculizar el tráfico vehicular o afectar viviendas y cables del tendido eléctrico. Mientras que, a los automovilistas y motociclistas, se recomienda conducir con precaución, considerando la humedad y escorrentía superficial de las calzadas.
El ministro de Gobernación, Mario Durán dijo que ante las condiciones climáticas de una depresión tropical, ya se tienen identificados cerca de 1,000 albergues para trasladar a las personas que puedan resultar afectadas por las lluvias, reiteró que en dichos albergues se cumplirá al pie de la letra los protocolos sanitarios por el COVID-19, pues simultáneamente se deberá atender la pandemia del Coronavirus y la emergencia de las lluvias.
“Todas las instituciones que forman parte del Sistema Nacional de Protección Civil están activadas, se pide a la población extremar las medidas de prevención y seguir las indicaciones de Protección Civil, tenemos los protocolos y se han actualizado en las últimas semanas, tenemos un trabajo coordinado con las alcaldías y las diferentes comisiones. Solo en la zona costera del país hemos identificado 750 puntos de riesgos, cuando se haga más definida la situación de lluvias vamos a actuar sobre eso”, aseguró Durán.
Ernesto Muyshondt, alcalde de San Salvador expresó que, sin descuidar el combate al COVID-19, es necesario que las comunas y el Gobierno central unan esfuerzos para prevenir daños, reaccionar oportunamente y con eficiencia ante la alerta por lluvias. De darse evacuaciones estas deben ser de la manera más ordenada posible sin violar la cuarentena y las diferentes medidas sanitarias por el COVID-19.
El edil capitalino informó que hay 214 colaboradores de la Unidad de Desechos Sólidos quienes se encargarán de limpiar los 15,721 tragantes del municipio de San Salvador; además, 117 colaboradores de la Unidad de Parques que tendrán la tarea de en poda de árboles y limpieza de quebradas; se han preparado 160 albergues que pueden ponerse a disposición del gobierno en caso de ser necesario, la mayoría de estos son casas comunales que guardando las medidas de distanciamiento social, pueden albergar hasta a un máximo de 4,800 familias.