Tormentos

Tormentos,

de un pueblo

sangrante,

que se asesina

a sí mismo

con odio y sin

lamentos.

De una madre que llora

a su hijo desaparecido

como en el silencio.

Tormentos,

porque entre pobres

y pobres

hay muertos, y todo es

por la cancha,

la extorsión

y el miedo.

De un país que

se muere

de hambre,

mientras los

jóvenes yacen

en el suelo

con un tirro

en la frente.

Tormentos

que te hacen llorar

de día y de noche

por una guerra

sin fundamentos.

Tormenta,

tú que con tus truenos

nos hablas;

háblanos en español

porque no entendemos.

Ubaldo Ramos.

Ver también

La muerte de Santa Claus (Cuento)

Miguel Ángel Chinchilla Tremenda trifulca se armó en las graderías populares del estadio: las barras …